Ganar, una costumbre de la Scaloneta que parece no cambiar. Sin importar el título que esté en juego o la calidad del rival. Por eso no debe sorprender el 1 a 0 frente a Chile, para asegurar pasaje a cuartos en una Copa América que Argentina va a defender a muerte.
El partido arrancó con Chile replegado y con la Scaloneta dominante, pero al equipo albiceleste le costó al inicio crear chances de gol, salvo un desborde de Nico González que no pudo conectar Julián Álvarez con potencia desde una posición favorable.
La preocupación llegó a los 20 minutos por una pequeña molestia muscular de Leo Messi que obligó a tratarlo fuera de la cancha con el kinesiólogo. Aunque luego volvió a jugar con normalidad.
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Hasta que en otro robo en salida rival, Messi remató desde afuera y la pelota rozó el palo con Bravo suplicando que no sea gol. Argentina presionó y tuvo dos chances, con un remate de Julián Álvarez que se fue desviado y otro de De Paul, por encima del travesaño.
En el segundo tiempo siguió el dominio albiceleste y a los 15 minutos Nico González reventó el travesaño tras un manotazo de Bravo. El ingreso de Lo Celso y Di María no dio rédito inmediato y Diibu Martínez tuvo dos atajadas extraordinarias frente a remates de Echeverria.
Y cuando el partido parecía irse a un 0 a 0 inevitable, tras un córner, la pelota quedó a la deriva en el área, y Lautaro Martínez reventó el arco. Hubo dudas por una posición de Lo Celso, pero el VAR validó el gol. Y el gol se festejó doble.
En el final, el Toro tuvo el segundo tras una corrida con asistencia de Di María, pero el delantero de Inter la picó y Bravo salvó con lo justo. Y fue 1 a 0, suficiente para seguir con la estela triunfal.
