La concentración leprosa en Ricardone trajo consigo un mayor hermetismo de parte del cuerpo técnico y ciertas reglas que se le “sugirió” al plantel en cuanto a la atención con la prensa.
Así, Javier Torrente dispuso hablar con los medios sólo un día a la semana, algo que sucederá hoy en Bella Vista, donde el técnico confirmaría el equipo que mañana a las 19.10 recibirá a All Boys con el arbitraje de Mauro Vigliano.
De todas maneras, el técnico no saldría con ninguna sorpresa, más allá del anunciado retorno de Marcelo Estigarribia y la chance que se le abriría al juvenil Federico Falcone.
Con un esquema 3-4-1-2, que por momentos se transformaría en un 5-3-2, el técnico innovaría con la presencia de Diego Mateo en defensa. La escasez de defensores en el plantel obliga a Torrente a improvisar en cada partido. Frente a Gimnasia de La Plata ubicó a Leonel Vangioni como lateral izquierdo, y ante Racing ese lugar lo ocupó Ignacio Fideleff, quien se desempeña como central.
Las lesiones de Alexis Machuca, Luciano Vella y Fabricio Fuentes, y la expulsión de Cristian Lema, dejaron al técnico sin muchos recursos en defensa. Y antes que apostar al debut de algún juvenil como Guillermo Ferracuti o Jonathan Valle, el DT prefirió ubicar a Mateo en la zaga, armando una línea de tres “mentirosa”, ya que Cristian Díaz por momentos aparecerá como lateral derecho y Marcelo Estigarribia también deberá retroceder al puesto de lateral.
Los once serían Sebastián Peratta; Diego Mateo, Rolando Schiavi e Ignacio Fideleff; Cristian Díaz, Hernán Villalba, Leonel Vangioni y Marcelo Estigarribia; Mauricio Sperduti; Maxi Urruti y Federico Falcone.
En cuanto a Sperduti, quien ayer se sumó al grupo tras trabajar en Ezeiza con el seleccionado argentino, el técnico tendría pensado ubicarlo como enlace y por eso en los ensayos de la semana ubicó a Martín Tonso en lugar del Gordo.