Una mujer de 57 años fue torturada y asesinada de un puntazo en el cuello durante un presunto intento de robo ocurrido en su casa de la localidad bonaerense de Monte Grande. Según fuentes policiales, el homicida abandonó la vivienda sin llevarse dinero ni algún objeto de valor de la vivienda, por lo que no descartan que el hecho esté relacionado con un ajuste de cuentas o una venganza contra el hijo de la víctima, quien está recluido en el penal de Sierra Chica.
La víctima fue identificada como María del Carmen Ponce, quien se había mudado a la casa de Sardi 415 de Monte Grande hacía tres meses, y vivía allí con una nieta de 15 años que no se hallaba en la vivienda en el momento del homicidio.
Según fuentes policiales, el padre de la adolescente actualmente se encuentra preso en la cárcel de Sierra Chica acusado de robo calificado.
Además, la mujer, quien hasta noviembre del año pasado vivía en el barrio El Pantano de Esteban Echeverría, tiene otra hija que vive en Francia y que le enviaba una suma de dinero mensual para ayudarla.
Todo comenzó cerca de la 1 de ayer, cuando una vecina llamó al 911 porque había escuchado gritos que provenían de la casa de Ponce y había visto salir a un hombre por una ventana con un bolso, que luego dejó abandonado al costado de la vivienda.
Al llegar el patrullero, la mujer le contó a los policías que había alcanzado a correr al delincuente, pero que finalmente se le escapó “porque era más veloz”.
Al ingresar a la casa, los policías encontraron el cuerpo de la mujer en medio de un charco de sangre en su habitación, totalmente vestida, con un profundo corte en el cuello provocado con un cuchillo de cocina y sus manos atadas con el cable del teléfono.
Un jefe policial relató a Télam que la habitación estaba totalmente revuelta, pero que la mujer no presentaba signos de haberse defendido, y que si bien el delincuente había robado el equipo de audio no había en principio ningún otro faltante de la casa.
“No hay signos de resistencia en el cuerpo de la mujer, no hay uñas rotas, ni pelos, ni nada. Seguramente la persona que entró le exigió algo a su víctima, pero no sabemos qué, ya que la mujer no tenía dinero. Apenas si tenía algunas joyas que quedaron guardadas en un cajón”, dijo el vocero policial.
El investigador agregó: “Si fue un homicidio en ocasión de robo, nos resulta raro que el delincuente haya entrado sin armas, ya que utilizó un cuchillo que tomó de la cocina, y que no haya robado otra cosa que el equipo de audio”.
Por eso, los pesquisas mantienen otras líneas investigativas, como por ejemplo la del ajuste de cuentas.
“Lo único que podemos pensar es que sea un ajuste relacionado al hijo que la mujer tiene en la cárcel”, explicó un pesquisa.
Sobre esto, el titular de la Jefatura Departamental de Almirante Brown, Carlos Perillo, sostuvo: “Estamos tratando de establecer, dado que el hijo de la señora está detenido en Sierra Chica por un robo, si un individuo que ha estado con él tuvo que ver con este hecho”.
Los voceros comentaron también que la nieta de la víctima (hija del detenido) llegó a la vivienda a las 4 y se encontró con ese panorama. Dijo que había estado en la casa de unos amigos y que había regresado en ese horario porque se le había hecho tarde.
La policía intenta determinar cómo ingresó el homicida a la casa. “Sabemos que escapó por una ventana de la cual sacó una reja, pero no tenemos en claro cómo entró”, agregó el jefe policial.
En la tarde de ayer, los investigadores demoraron a dos jóvenes que se hallaban a pocas cuadras de la casa donde ocurrió el crimen, ya que los rasgos y contextura física de uno de ellos coincide con la descripción que realizó la vecina que persiguió al delincuente.