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Trágico final para el campeón mundial venezolano Edwin Valero

El campeón de peso ligero de la CMB fue arrestado ayer tras asesinar a su esposa. Hoy apareció muerto en su celda ahorcado con sus propias prendas de vestir.

El venezolano Edwin «Inca» Valero, campeón mundial de boxeo, apareció hoy muerto en su celda, ahorcado, tras ser detenido ayer por el asesinato de su esposa Jennifer Carolina Viera de Valero, informó la policía. 

El director de la policía judicial, Wilmer Flores, dijo que el campeón fue localizado colgado con su propia ropa a la 1:30 de la madrugada en su calabozo de la policía del estado Carabobo. «Un recluso que se encontraba en un área adyacente» escuchó «ruidos en el interior de la celda» y avisó a la policía, que se encontró con Valero «colgado utilizando sus propias prendas de vestir para ahorcarse y como punto fijo la reja de su celda». 

El jefe policial explicó que los funcionarios encontraron a Valero aún con signos vitales, pero poco después falleció por «asfixia mecánica». Los exámenes forenses, agregó, permitirán «establecer el verdadero resultado o las causas de la muerte». 

Valero, actual campeón ligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), fue arrestado ayer tras confesar que había asesinado a su joven esposa de 24 años en un hotel de Valencia, Carabobo, con un arma blanca. 

El pugilista, quien también fue campeón superpluma de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), tenía orden de presentación y de desintoxicación por un tribunal tras haber golpeado a su esposa el pasado 25 de marzo. 

Valero, de 28 años, gran admirador del presidente venezolano Hugo Chávez y que también en 2007 había sido acusado de agredir a su madre y a su hermana, estaba libre bajo fianza y en un régimen de presentación ante las autoridades cada 90 días. 

Por el episodio de marzo, Valero había sido arrestado a instancias del Ministerio Público, acusado de golpear a su esposa, que a su vez había ingresado en una clínica privada con una fractura en una costilla, cuyo desplazamiento le perforó un pulmón. 

Pero la víctima no quiso formalizar la denuncia y dijo que sus golpes eran producto de una caída.

El boxeador, que en abril pasado había viajado a La Habana para desintoxicarse, había ganado sus primeros 18 combates por nocaut en el primer asalto.

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