El secretario de Transporte de Santa Fe, Osvaldo Miatello, salió a expresar el enojo porque la adecuación del presupuesto planteada por el DNU por parte del Ejecutivo Nacional (el proyecto de ley no pasó en el Congreso) destina 38 mil millones de subsidios al transporte del interior para este año. Esto es, se enojó el funcionario, “menos que los 46 mil prometidos por el Ministro (nacional) y mucho menos que los 70 mil solicitados por diputados” de provincias afectadas por la inequidad de la ayuda. “Es una catástrofe para el transporte de pasajeros del interior”, resumió Miatello.
«Con esto, el Amba sigue pagando 18 pesos, sigue recibiendo cuatro veces más de subsidios (que las provincias) y a nosotros nos ajustan. Tenemos que avanzar en un fondo común de todos los subsidios y dividir de forma igualitaria en base a la cantidad de kilómetros recorridos y la cantidad de unidades», remarcó el titular de Transporte de Santa Fe.
“Teníamos con una promesa del Ministerio de Transporte de 46 mil millones para el interior durante el año, cifra que estimamos no alcanzaba y por eso veníamos haciendo reclamos en pos de una ley para repartir equitativamente los subsidios entre el Amba y el interior. Mientras eso sucedía, se hablaba de una ley de emergencia de 70 mil millones para el interior que permitía llegar a fin de año”, explicó Miatello. La cifra de 46 mil millones, ahora seccionada en función de los recortes a todos los subsidios nacionales pactados con el FMI, estaba de hecho en el proyecto de Presupuesto enviado por la Casa Rosada al Congreso, que no fue aprobado ante el rechazo opositor.
«Para todo el interior incluso, nos parecían escasos, pero la semana pasada estuvimos en la Cámara de Diputados donde hay varios proyectos en tratativa. Uno de ellos proponía elevar los fondos a 70 mil millones por lo que nos volvimos conformes ya que con eso se igualaban los fondos del Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba)», reveló el funcionario.
Pero ahora, con esta reducción, desde la provincia advirtieron que solo alcanza para sostener el sistema hasta septiembre, ya que a partir de entonces «se terminan» los fondos. «Nosotros, como operadores del sistema en las provincias, no sabemos cómo van a venir los nuevos convenios y cuáles van a ser las exigencias ni de donde va a salir la plata», advirtió.
¿Una cuestión administrativa?
El DNU publicado el jueves pasado en el Boletín Oficial contiene la retracción de fondos que enoja a Miatello y, es de esperar, a sus pares del resto de las provincia afectadas: en su artículo 19 reduce a 38 mil millones los envíos a lo que no es Amba.
“Genera una situación de absoluta incertidumbre, no sabemos hasta cuando va a aguantar, porque impide cualquier tipo de planificación”, insistió el funcionario antafesino. “Estamos preocupados porque esto visualiza a corto plazo un panorama complicado para el transporte del interior”, repitió.
El funcionario buscó una explicación de la diferencia: por qué no les tocaron los fondos a la Ciudad de Buenos Aires y su región metropolitana. El dinero para sostener el transporte de pasajeros en las provincias sale de la administración federal como subsidio. “En el caso del Amba, lo hace como rentas generales” y no se toca por literalidades administrativas.
La reacción de Javkin: «Habrá que pelear»
“Lamentablemente, hay que seguir peleando porque se confirma este decreto del Presupuesto y ni siquiera quedaron los 46 mil millones, que ya eran insuficientes. Pero también se confirma que lo que no se pone en riesgo son los subsidios para el Amba. O sea que de nuevo hay un esquema de usuarios y trabajadores de segunda contra usuarios y trabajadores de primera. No tenemos posibilidades de resistir así porque se está poniendo en peligro la propia supervivencia del transporte”, evaluó el intendente Pablo Javkin.
Consultado por la radio LT8 sobre la adecuación de las cuentas públicas con recorte de subsidios al transporte del interior, el jefe del Palacio de los Leones respondió tajante: “Habrá que pelear”.
“Yo creo que en algún momento se pensó en movilizar a Buenos Aires y no lo descarto. Vamos a tener que tomar alguna medida, estoy en contacto con los intendentes del interior y esperemos que el Congreso apure alguna de las medidas que hemos charlado con los legisladores respecto a corregir la distribución de los subsidios. Pero tenemos un escenario inminente de tres semanas de complicaciones para prestar el servicio”, remarcó.
También descartó apelar a la vía judicial –“Se necesitan medidas urgentes”, sostuvo– pero trazó un panorama desolador: “El interior de la Argentina no tiene manera de solventar el sistema de transporte. Ya no discutir mejoras y frecuencias, porque el gasoil duplicó su precio, en el Amba hay gasoil subsidiado y en el interior no. En el Amba hay gasoil y en el interior no”. Y continuó: “Para afrontar la paritaria y el costo de servicio, el nivel de subsidios creció en el Amba en proporción para poder solventar el servicio; en el interior no. Entonces, siempre vamos a estar en una proporción de 85 a 15. Así es imposible si no se corrige esto. No puede ser que todo el interior le pague el transporte público al Amba y que se quede sin transporte el interior”.
Javkin también recordó que los ahora recortados 46 mil millones de pesos eran una previsión de diciembre pasado que, para peor, ya queda corta. “Si hubiera estado el Presupuesto hubiéramos tenido ese dinero, pero después vino la paritaria, y la inflación y la suba del gasoil”.
“No sé si no tendemos que hacer una demostración de todo el transporte del interior en Buenos Aires para que se entienda la gravedad y lo insostenible de esta situación”, concluyó el intendente.
