En la mañana del lunes recorría los medios de la ciudad el relato del papá de un joven de 19 años. El hombre denunciaba que su hijo había ido a bailar el viernes a un boliche de la costanera norte y recibido una brutal golpiza por parte de otros dos chicos. Los golpes lo dejaron inconsciente y al despertarse, la víctima había sido retirada del local bailable. Según la denuncia, no recibió ningún tipo de asistencia. El caso es investigado por la Justicia, por lo que para facilitar el proceso la Municipalidad decidió la clausura de Blue, el local en cuestión.
Gustavo Zignago, secretario de Control y Convivencia Ciudadana, informó: “Al tomar conocimiento de la denuncia y constatando la existencia de las actuaciones en la policía, entendimos la clausura como una herramienta de colaboración permanente con la justicia”.
En declaraciones a Radio 2, Zignago explicó que la medida ayuda a preservar los elementos de prueba y se extenderá por quince días, o hasta que el fiscal lo disponga. Además, indicó que no hay registro fílmico de cámaras municipales ni provinciales de la zona, pero que probablemente haya testigos, ya que muchos jóvenes asisten a ese boliche.
“Independientemente de la crónica del hecho, sobre las circunstancias que suceden en el interior o en el entorno de un local bailable, en primer lugar hay una responsabilidad inmediata del titular comercial. Sin embargo, no podemos negar el momento en el que vivimos, la violencia urbana en todas sus manifestaciones nos lleva a tener que enfrentar este tipo de situaciones”, agregó el funcionario municipal. Y concluyó que desde el Municipio deben controlar que “los bolicheros ejerzan la seguridad en el interior del local” y “hacer reflexionar y crecer los valores de la sociedad”.