La indignación del Real Madrid con todo lo sucedido el domingo en la final de la Copa del Rey de básquet va en aumento e incluso amenazó con dejar las competencias españolas.
Real denunció que en el polémico instante en que los árbitros se detuvieron para analizar la repetición (el VAR del básquet) en la jugada clave sólo consultaron dos de las 11 tomas de cámara disponibles. Con sólo dos secuencias decidieron que el supuesto tapón de Randolph a Tomic fue ilegal, con lo que el título fue para el Barcelona.
Tras constatar con la mesa que hasta nueve de los posibles tiros de imagen no fueron siquiera observados, el Real Madrid trasladó un ultimátum a los directivos de la ACB: o los árbitros de la final son alejados indefinidamente por el error cometido, o el club abandona la Asociación de Clubes.
Si bien algunas voces plantean que la determinación se consulte antes con sus socios, el equipo de los argentinos Campazzo y Deck cree que el error cometido es de tal magnitud que justificaría la salida de todas las competiciones gestionadas por la ACB: la Liga y la Copa del Rey.
La entidad presidida por Florentino Pérez entiende que hay un desarrollo mucho más interesante para el club en la Euroliga, y mucho más incluso por motivos empresariales: mientras la ACB es una asociación de clubes, la Euroliga es una sociedad anónima de 11 clubes europeos, uno de los cuales es el Real Madrid.