El entrenador Giuseppe Iachini, despedido hace solamente tres meses del Palermo, regresó al banco del conjunto siciliano para intentar evitar el descenso del equipo, que ocupa la posición número 15 en el campeonato italiano, y que sufrió la salida del extécnico de Lanús, Guillermo Barros Schelotto.
«Querría agradecer a Beppe Iachini por volver en un momento difícil para el club siciliano», declaró el presidente del club italiano, Maurizio Zamparini, en un comunicado, disculpándose ante los aficionados por «varios meses de caos».
Iachini, con el que el Palermo logró el ascenso en 2014, fue despedido el 10 de noviembre en contra de la opinión de los jugadores y de los aficionados.
Su primer sustituto, Davide Bellardini, cedió el puesto dos meses después a Guillermo Barros Schelotto. Sinembargo, «El mellizo» se vio obligado a renunciar la semana pasada al no poseer la licencia de entrenador requerida por la UEFA.
Tras la fecha 25 de la Serie A, el Palermo cuenta con 4 puntos de ventaja sobre el Frosinone, que marca las posiciones de descenso.
El despido de Bellardini supuso el número 30 desde que Zamparini llegó a la presidencia del club en julio de 2002.
