Luego de aceptar el pedido de licencia de su titular, Agustín Zbar, la Asociación Mutual Israelita Argentina (Amia) le solicitó este lunes a la Delegación de Asociaciones Israelitas de la Argentina (Daia) dejar sin efecto el pedido para que abandone la acusación contra la ex presidenta Cristina Kirchner por supuesto encubrimiento de Irán, y pidió disculpas a quienes se hayan sentido «lastimados u ofendidos».
En un intento por dar por terminada la polémica por la misiva difundida la semana pasada, la AMIA expresó: «Se ha tomado la decisión de remitir a la Daia una nota en la que se solicita el retiro de la carta enviada, de manera de dejar sin efecto el requerimiento efectuado».
«La preocupación por mantener la causa Amia alejada de intereses partidarios y por evitar que la misma sea utilizada con fines electorales, motivaron un pedido que lejos estuvo de querer frenar la investigación sobre las razones que llevaron a firmar el pacto con Irán», explicó la mutual.
En un comunicado, también señaló que «reitera el pedido de disculpas a quienes se ha lastimado u ofendido con declaraciones y actitudes que fueron inapropiadas e incorrectas».
De todos modos, aclaró que la carta enviada a la Daia no pidió abandonar la investigación en curso por la firma del memorándum, ni trató de desligar responsabilidades de la ex presidenta Cristina Kirchner, acusada de presunto encubrimiento de Irán.
Al respecto, el ex presidente de la Daia Alberto Indij consideró que «el contenido de la carta y las explicaciones de Zbar son inexplicables».
En declaraciones a FM La Patriada, afirmó que «fue un escándalo innecesario, inexplicable y no tenía que haber estado nunca en los medios».
«Creemos que la denuncia debe ser investigada, sea fundada o no, sea buena o no. Lo que nosotros buscamos como institución era que se investigue», destacó Indij.
A su turno, el ex director de la Daia Jorge Elbaum evaluó que la carta se publicó porque «la Amia quiso abandonar el barco antes de que se hunda».
«Esta es una interna dentro de la derecha de la colectividad argentina judía. Una interna dentro del PRO, entre radicales y fundamentalistas de Cambiemos», resaltó Elbaum.
En declaraciones a radio FutuRock, agregó: «Agustín Zbar tiene fuertes contactos en Comodoro Py y la Corte Suprema y fue socio de (Carlos) Rosenkrantz, tiene clara noción que el juicio por el memorándum no tiene posibilidades de prosperar. Abandonan el barco antes de que se hunda».
La semana pasada se conoció una carta enviada por la Amia a la comisión directiva de la Daia para pedirle que dejara de ser querellante en la causa contra Cristina Kirchner, y entre los motivos nombró la «grieta» entre los argentinos.
Tras el rechazo del brazo político de la comunidad judía, Zbar pidió licencia por tiempo indeterminado y la mutual dio marcha atrás con el pedido.
