Cuando el 8 de abril encontraron a Micaela García muerta y con signos de abuso sexual en un descampado de Entre Ríos, Baby Etchecopar se sentó frente al micrófono de Radio 10 y le habló a su oyente. “Si tu hija de 12 años sale mostrando las tetas, con un tatuaje y haciendo trompita, hay una provocación”, dijo. En pocas horas empezaron los repudios masivos en las redes sociales. Días después llegaron las denuncias por violencia machista a la Defensoría del Público y las fechas de su espectáculo en varias ciudades de la provincia de Buenos Aires fueron canceladas. Hoy tenía que actuar en el Teatro Astengo de Rosario y pasó lo mismo. Apenas se anunció su show en la ciudad, su llegada fue repudiada por organizaciones feministas que hicieron pegatinas en la calle y de mujeres sin pertenencia orgánica a espacios de militancia. A ellas se sumó el pronunciamiento del Concejo Municipal, que anteayer rechazó por unanimidad las expresiones. Después de este apoyo institucional, la productora Grimolizzi decidió cancelar el show y anunció la devolución de las entradas. Para Majo Gerez, del colectivo Mala Junta y de Ni Una Menos Rosario, ante el avance de un movimiento de mujeres que gana consenso en la sociedad, la idiosincrasia machista se refuerza y es más reactiva. “Al mismo tiempo, el repudio automático evidencia que estamos más alertas, articuladas y empoderadas”, agregó. Del otro lado y de nuevo frente al micrófono, Etchecopar aseguró que la suspensión de su show en Rosario responde a que la Argentina “es un país de cagones miserables” en el que “cinco atorrantes” pueden impedirle a su público ir a verlo.
Show suspendido
Para Majo Gerez la suspensión del show del conductor porteño evidencia un repudio hacia la violencia machista que no es sólo del movimiento feminista sino de muchas mujeres que se sintieron interpeladas y se expresaron por las redes. “Las mujeres queremos una ciudad libre de violencia y de machistas y Baby Etchecopar viene expresándose en modo misógino. No es un derrape o una vez aislada que se puede equivocar y asumir el error. Es alguien que es reiterativo en sus expresiones fascistas, racistas, discriminatorias y machistas. Cotidianamente infringe en la ley 26.485, que busca prevenir y erradicar todo tipo de violencia”, explicó.
Según Gerez, los argumentos como los de Etchecopar no tienen peso en una sociedad que está diciendo que no a la violencia machista. “Lo vimos con Gustavo Cordera, ya no se dejan pasar este tipo de expresiones y el costo político es que en Rosario no sea bienvenido”, explicó.
La mirada en la ropa
Después de los dichos en Radio 10, Etchecopar salió a aclarar que no quiso decir que “una chica de 12 años se pone una pollera corta para que la violen”, sino que quería llamar la atención de los padres para que se fijen cómo se visten sus hijas, porque “en un gran porcentaje, los padres son los responsables de lo que le pasa a los chicos”.
Consultada sobre estas afirmaciones, Gerez explicó que hay una mirada patriarcal que sigue poniendo al cuerpo de la mujer en el lugar de propiedad de un otro. “Las mujeres tienen derecho a vestirse como quieran y no son responsables de la violencia que se ejerce contra sus cuerpos. Pedir la intervención de los padres es que las mujeres sigamos a merced de otro”, explicó.
Para Gerez, hay que trabajar en cómo la sociedad construye la mirada sobre los cuerpos: “Pareciera que el cómo nos vestimos no fuera hacia nosotras mismas sino hacia un varón al que queremos agradar y que puede disponer de nosotras en función de su deseo”.
La respuesta de Etchecopar
“Yo me puedo no presentar en Rosario y me chupa un huevo”, dijo ayer el conductor en Radio 10. “Este fascismo, este autoritarismo, este extremismo que se vivió en los setenta de la mano de delincuentes que tienen nombre y apellido y que integran las listas de Cristina –por la ex presidenta Fernandez de Kirchner– creen que me van a molestar”, agregó y siguió: “Se puede ser tan cobarde como pueblo, como ciudadano, que se permite que cuatro o cinco atorrantes te prohíban ver una obra de teatro. Usted, señor, que iba a ver mi espectáculo es el mismo que cuando violan a su hija pide justicia y no le dan respuesta. Y saben por qué lo cogen porque este es un país de miserables cagones. Yo tenía mucha fe en Rosario porque es un pueblo de cojudos. No sabía que 600 cojudos pueden ser callados por un grupo de activistas”.
El Concejo rechazó
“El Concejo Municipal de Rosario repudia y rechaza las expresiones del Ángel Baby Etchecopar en cuanto las mismas constituyen sistemáticamente discursos mediáticos discriminatorios, misóginos y violentos contrarios a los derechos humanos, especialmente hacia las mujeres y la diversidad de género”. Así expresaron anteayer por unanimidad los concejales de la ciudad su rechazo a las declaraciones del conductor radial. Después de este pronunciamiento, el show fue cancelado. Desde el lunes los organizadores devuelven la plata de las entradas a quienes pretendían ir.