La detención de siete delegados del Sindicato de Empleados Gastronómicos (Uthgra) de Rosario en horas de la mañana de este martes derivó en un masivo reclamo frente al Centro de Justicia Penal (Mitre 2801) que, desde la siete de la tarde, se llevó adelante con el apoyo de la CTA Autónoma para exigir “la inmediata liberación de los compañeros». Finalmente, recuperaron la libertad alrededor de las diez de la noche.
“Siete detenidos por una protesta obrera, me parece demasiado”, dijo el secretario gremial de Gastronómicos, Sergio Ricupero, en relación con la criminalización de seis delegados y un empleado del sindicato. El gremialista dijo que se quedarían frente a la sede de Fiscalía hasta que liberaran a sus compañeros, lo que se esperaba para este martes por la noche. A las 22 fueron liberados y serán imputados, en libertad, este miércoles a las 15 por amenazas coactivas.
“Los detuvieron a las 11 de la mañana cuando marchaban en un vehículo del gremio que los fue a buscar para sumarse a la marcha porque no había transporte. En el camino vieron un negocio abierto e invitaron a los compañeros a sumarse al paro. Dieron la vuelta e hicieron lo mismo con otro bar. Pero fue en paz. Se detuvieron, tocaron un rato el bombo y siguieron”, explicó Ricupero en relación con el tradicional bar Blanco de avenida Pellegrini y Alem, y otro ubicado en la esquina de 3 de Febrero y Alem.
Según informó la Fiscalía, las detenciones fueron por dos hechos de “amenazas coactivas en el marco del paro nacional a locales” comerciales. Según esos datos, la situación fue denunciada al 911, a través del cual se brindó la descripción de una camioneta en la que secuestraron bengalas de humo, un mortero con seis bombas de estruendo, 27 bombas de olor y un bombo, siempre según la información oficial. Los bares que radicaron la denuncia están ubicados en 3 de Febrero al 400 y Alem al 1700, dijo la Fiscalía.
“Están detenidos en la Jefatura de Policía desde la mañana: me parece demasiado para una protesta obrera y pacífica. No me cabe en la cabeza”, lamentó Ricupero.
