La presidenta Cristina de Kirchner selló este martes con 16 gobernadores una nueva tregua hasta fines de junio en el pago de los vencimientos de deuda de las provincias con Nación, lo que les representará a los distritos un ahorro durante este segundo trimestre de 1.812 millones de pesos.
Se trata de un alivio clave, en medio de la presión adicional generada por la escalada de elecciones y en la antesala del desafío que representa para los Ejecutivos el cumplimiento del medio aguinaldo.
El último paraguas en los pagos del Programa Federal de Desendeudamiento había expirado el 31 de marzo. Luego se abrió un paréntesis de varias semanas que generó incertidumbre en algunas administraciones, temerosas de quedar temporalmente marginadas del beneficio al ritmo de las urgencias electorales del kirchnerismo.
La convocatoria finalmente llegó y terminó por confirmar que un mandatario quedó –al menos por ahora– fuera de la rúbrica: el rionegrino Alberto Weretilneck (Frente Grande, con posterior coqueteo massista), quien buscará su reelección el 14 de junio frente al senador nacional kirchnerista Miguel Pichetto.
“Habría un sector de la Casa Rosada que promueve que Río Negro sea castigada por el tema de la fruticultura”, disparó anteayer Weretilneck, en la previa al desembarco –previsto para hoy– de la presidenta en General Roca, donde se mostrará con Pichetto y con el intendente Martín Soria.
Otro gobernador, en cambio, recibió con alivio el llamado de Balcarce 50: el mendocino Francisco “Paco” Pérez, en medio de la tensión con la jefa del Estado por el armado de la lista de candidatos peronistas y por su decisión de sostener el desdoblamiento de la elección provincial.
El saludo ante las cámaras entre ambos fue frío, aunque luego la primera mandataria le brindó un guiño en su discurso. “De tu provincia, Paco Pérez”, dijo, al hacer referencia a Mendoza.
Weretilneck y Pérez ya habían sufrido en 2014 el rigor del enojo presidencial, cuando quedaron al margen durante un trimestre del programa de desendeudamiento, en medio de sus críticas al proyecto de nueva ley nacional de hidrocarburos. El lote de castigados alcanzó también al justicialista Martín Buzzi (Chubut) y al neuquino Jorge Sapag (MPN).
Pero esta vez, Pérez, Buzzi y Sapag fueron de la partida, lo mismo que los otros mandatarios que firmaron la prórroga ante la presidenta, ante el ministro de Economía, Axel Kicillof; el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y los titulares de Educación, Alberto Sileoni, y de Desarrollo Social, Alicia Kirchner.
Ante ellos desfilaron un precandidato presidencial en firme y otro autoexcluido tras el pedido de Cristina de Kirchner (el bonaerense Daniel Scioli y el entrerriano Sergio Urribarri. También el chaqueño Jorge Capitanich, el sanjuanino José Luis Gioja, la catamarqueña Lucía Corpacci, el jujeño Eduardo Fellner, el riojano Luis Beder Herrera, el santacruceño Daniel Peralta, el misionero Maurice Closs, la fueguina Fabiana Ríos y el correntino Ricardo Colombi. Por Tucumán, en tanto, estuvo el vice de José Alperovich y candidato a gobernador, Juan Manzur.
El caso salteño fue especial: sumido en el cierre de campaña para los comicios del domingo, en los que buscará su reelección, Juan Manuel Urtubey protagonizó una teleconferencia desde Salta con Cristina de Kirchner. Su enviado fue el ministro de Economía, Carlos Parodi.
Con la nueva edición del programa –lanzado en 2010, para la reestructuración de 64.864 millones de pesos de stock de deuda–, se amplió hasta el 30 de junio el período de gracia para deudas del plan, con amortización de capital en 185 cuotas del 0,54 por ciento y una última del 0,10 por ciento; intereses mensuales y consecutivos con primer vencimiento en julio de 2015 y tasa fija del 6 por ciento anual.