En los últimos días el secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos, expresó públicamente sin dar demasiadas precisiones que su cartera está trabajando para recuperar el corredor del tren de pasajeros Rosario-Buenos Aires. Las declaraciones del funcionario hicieron mucho ruido en la ciudad y volvieron a poner en escena la necesidad de poner en condiciones ese ramal. Consultados por este medio, especialistas en temas ferroviarios de la ciudad tomaron esas palabras con cautela y esperan que esta vez puedan darse avances concretos. No es para menos, ya que en los últimos años la reactivación de líneas férreas fue eje de proyectos, campañas políticas y anuncios en todos los niveles del Estado, aunque luego hubo pocas acciones palpables.
El municipio hará su puesta en escena mañana a la mañana en el Palacio de los Leones, cuando recibirá a sectores involucrados en el tema para mostrar maquetas, planos y la propuesta que el Ejecutivo local tiene al respecto en el marco del Plan Estratégico Metropolitano. También se dialogará sobre un pedido de audiencia formal a Ramos para los próximos días (ver aparte).
Desde la propia asunción de Néstor Kirchner a la presidencia, allá por el año 2003, la idea de reactivar ramales ferroviarios para el transporte de pasajeros sobrevuela no sólo la ciudad, sino todo el país. Sin embargo, y a pesar de algunos anuncios resonantes, poco fue lo que se concretó hasta ahora.
La semana pasada, Ramos volvió a poner el tema en agenda al señalar en declaraciones radiales que “por orden de la presidenta” (Cristina Fernández de Kirchner) su cartera está trabajando para recuperar el corredor del tren de pasajeros Rosario-Buenos Aires con su óptimo servicio.
“Si hay voluntad política se puede lograr la revitalización de los trenes. Estamos teniendo reuniones para ver cómo podemos mejorar el transporte del área metropolitana, tanto del Gran Rosario como el Gran Santa Fe”, indicó en declaraciones radiales el pasado martes y sin dar un solo detalle más el ex intendente de Granadero Baigorria. A pesar de eso, sus palabras llamativamente hicieron mucho ruido en la ciudad.
Vale recordar que el transporte ferroviario local hoy mantiene tres servicios semanales a Buenos Aires, en el ex ramal Mitre. Basta sólo utilizar alguno para saber que la prestación es pésima; un viaje hasta Retiro puede llegar a demorar hasta unas ocho horas y rara vez se respetan los horarios de partida.
Con todo, este medio consultó a especialistas y promotores de la recuperación del ferrocarril para obtener su visión sobre los dichos de Ramos. Rolando Maggi, de la asociación local Amigos del Riel, valoró en primera instancia como positiva la “circunstancia” en la que se trae el tema a la agenda al recordar que uno de las dos firmas que opera la línea (la otra es Ferrocentral) Rosario-Retiro es Trenes de Buenos Aires (TBA).
Esa compañía era la concesionaria del tren de la línea Sarmiento que el miércoles 22 de febrero de este año en la estación de Once colisionó con los sistemas de paragolpes de contención de la estación. La formación transportaba en plena hora pico a más de 1.200 pasajeros a bordo y por el choque fallecieron 51 personas. Si bien el gobierno le quitó a esa compañía la explotación de las Líneas Sarmiento y también de la Mitre, TBA aún mantiene en muy mal estado, como se dijo, el corredor Rosario-Buenos Aires
Sobre la posibilidad de llevar a óptimas condiciones ese ramal, Maggi dijo que “hay que ser cautelosos, mesurados”. “Hay que tener un programa certero, fechas de finalización estudios, un cronograma de trabajo y también de inversiones. Hasta ahora lo que hubo fue un anuncio”, señaló el especialista en temas ferroviarios.
Para Maggi avanzar en el ramal Rosario-Buenos Aires es imperioso, pero sólo si funciona en óptimas condiciones, “con una buena prestación y si es atractivo al público”.
“Eso incluye una tarifa acorde al grueso de los potenciales pasajeros y un sistema rápido que atraiga a habituales usuarios de colectivos y automóviles –explicó–. Éste es el corredor más utilizado del país. La autopista como eje casi exclusivo de comunicación está colapsada, no va más. Por eso creo que hay que estudiar a fondo el tema y proponer algo superador. Estamos a la expectativa”, señaló el titular de Amigos del Riel.
En tanto, Leonardo Rico, representante de la ONG Tren para Todos, habló en el transcurso de la semana pasada y deseó que esta vez “ojalá” esté la voluntad política de avanzar en la conexión a Retiro. El experto recordó que integrantes de su organización estuvieron hace unos 10 días en las puertas del Congreso de la Nación para insistir en la sanción del proyecto “que crea una empresa nacional de ferrocarriles”. “Hace más de dos años que lo presentamos y nunca logramos que tuviera despacho en la Comisión de Transporte, que está manejada por el oficialismo”, indicó.
Desde esta organización señalaron que hace tiempo “alertaron” que “no ha habido un cambio en cómo se controla el ferrocarril”.
“En gran medida los trenes vienen manejados por concesiones de épocas de los 90, las cuales no se han preocupado por el servicio de pasajeros. Lo que cuestionamos es que como Estado nos estemos haciendo cargo de todo lo que cuesta más mantener (por el transporte de pasajeros) y que sigan las mismas concesiones en los negocios más rentables (en referencia a los trenes de carga), cuyos ingresos en manos públicas permitirían ampliar el servicio de pasajeros”, explicó Rico.
Con todo, en el transcurso de la semana y tras las palabras de Ramos no fueron pocos lo que recordaron la idea de llevar adelante el faraónico Tren Bala, acaso la promesa inconclusa más grande en la materia en la última década. A seis años de que el por entonces presidente Néstor Kirchner anunciara públicamente el proyecto que iba a posibilitar unir Rosario con Capital Federal en menos de dos horas, nada se hizo. Aún está fresca la postal del fallecido ex mandatario con una maqueta del proyecto en su mano el día de la presentación. Aquel anuncio también fue parte de la campaña a la gobernación provincial del ex candidato Rafael Bielsa, quien a la postre perdió la disputa con Hermes Binner.
