Un tribunal integrado por los jueces Rafael Coria, Nicolás Foppiani y Patricia Bilotta será el encargado de juzgar a partir de este lunes a Emiliano Javier “Jija” Avejera, Enrique Adrián “Cable” Solís y José Damián Pucheta por seis homicidios concretados y otros cuatro en grado de tentativas que ensangrentaron la ciudad entre noviembre de 2016 y febrero de 2018.
El primer hecho tuvo lugar el 10 de noviembre de 2016. Cerca de las 22.30 Javier Lisandro Fleitas fue asesinado por error en Callao y Mr. Ross en un ataque que tenía por fin terminar con la vida de Lautaro “Lamparita” Funes.
Fleitas iba en moto junto a su pareja y su hijo de 6 años cuando fue interceptado por un auto con vidrios polarizados desde el que fue baleado. Por este ataque está acusado en calidad de instigador Emiliano Avejera, quien habría ordenado el ataque a terceros por orden de Rubén Ariel “Tubi” Segovia, quien entonces estaba preso.
Un mes después, en otro ataque que también habría sido ordenado por Tubi Segovia, Enrique Adrián “Cable” Solís junto con al menos otras cuatro personas se presentó en la casa de Brisa Ojeda para matarla. Era 16 de diciembre y debían impedir que Brisa se presentara en una rueda de reconocimiento de personas de la que Segovia participaría tres días después al estar acusado del homicidio de su novio, Jonathan Rosales.
Sin embargo este ataque también resultó fallido porque quien abrió la puerta y fue asesinada por error fue la hermana de Brisa, Lorena Ojeda.
Por este hecho Cable Solís está acusado de ser partícipe secundario de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, por el concurso premeditado de más de dos personas y para procurar la impunidad de otro.
El primer día de 2018, cerca de las 20.30, Jorge Funes, padre de Lautaro, Alan, Ulises y Jonathan Funes, fue víctima de un intento de homicidio cuando se encontraba en la esquina de El Aguaribay y El Timbó, en la localidad de Alvear. Fue sorprendido por un auto del que se habría bajado Cable Solís junto a otras tres personas para balearlo con intención de causarle la muerte. Jorge Funes quedó herido tirado en la vereda e inmediatamente fue trasladado al Hospital Roque Sáenz Peña, de donde logró salir con vida.
Cuatro horas después, a las 22.15, Solís habría llegado hasta Abanderado Grandoli al 3611 en un Chevrolet Corsa gris de vidrios polarizados con José Damián Pucheta de acompañante y otras dos personas. En esa circunstancia Pucheta y uno de los que viajaba atrás dispararon contra un grupo de cinco personas, causando la muerte de Sofía Sabrina Barreto y Luis Hernán Tourn.
Por este hecho Solís y Pucheta están acusados de homicidio agravado por el uso de arma de fuego calificado por el concurso premeditado de dos o mas personas (dos hechos), tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y calificado por la participación premeditada de dos o más personas (tres hechos).
El 7 de enero, una semana después del fallido intento de homicidio de Jorge Funes, Solís tendría más puntería con dos de sus hijos. Está acusado de haber disparado desde un Fiat Siena contra Ulises Nicolás Funes, quien estaba en la puerta de la casa de su novia en Garay al 1400, causándole la muerte.
Por último, el 5 de febrero de 2018, cerca de las 14.15, Emiliano Avejera y Enrique Solís habrían interceptado a Jonathan Funes en el cruce de las rutas 14 y A 012 cuando volvía de visitar a sus hermanos Alan y Lautaro, presos en la cárcel de Piñero.
Según la acusación, Avejera, Solís y un tercero no identificado bloquearon el paso del Audi A3 en el que iba Funes (acompañado de una mujer de identidad reservada), quien atinó a escapar corriendo pero no llegó muy lejos, alcanzado por las balas de Jija Avejera. Consumado el homicidio escaparon en la Eco Sport en la que habían llegado, la cual luego abandonaron y prendieron fuego.
En concreto, Enrique Solís se sentará en el banquillo acusado de 5 homicidios agravados consumados y 4 en grado de tentativa y una pena de prisión perpetua; Emiliano Avejera por 2 homicidios agravados consumados y pena de 20 años de prisión y José Damián Pucheta 2 homicidios agravados consumados y 3 tentativas de homicidio y una pena de prisión perpetua.
