“Chucky, el muñeco diabólico»
Una madre le regala a su hijo un muñeco por su cumpleaños sin imaginar la naturaleza maligna que ese objeto esconde en su interior, lo que desata una serie de hechos oscuros y sangrientos que van del terror a la comedia.
Se trata de los entretelones de Chucky, el muñeco diabólico, remake del film clásico de los años 80 que tuvo una serie de regresos a lo largo de los años y que ahora cuenta con la dirección de Lars Klevberg, a partir de un guión de Taylor Burton Smith, basado en los personajes creados por Don Mancini, con las actuaciones de Aubrey Plaza, Mark Hamill y Brian Tyree Henry.
De este modo, el sádico juguete asesino está de regreso en los cines locales en plenas Vacaciones de Invierno, pero ahora digitalizado y con todos los aportes tecnológicos del cine actual.
En la trama de la nueva historia del terrorífico personaje que retoma momentos y situaciones del clásico de 1988, que traumó a niños y adultos en todo el mundo, la corporación Kaslan acaba de lanzar una nueva línea de muñecos de alta tecnología conocidos como Buddi, que adquiere fama a nivel mundial al punto de convertirse en el regalo perfecto para todos los niños. Es así como Karen Barclay decide regalarle uno de esos muñecos de moda a su pequeño hijo Andy por su cumpleaños. Sin embargo, un mal funcionamiento en su sistema técnico determinará que el muñeco adopte un comportamiento agresivo y psicópata, iniciando así una sangrienta oleada de muertes con un puñado de guiños pensados para los fanáticos de la saga.
Más allá del folclore tejido en redes sociales en las últimas semanas alrededor de la nueva cara del muñeco en cuestión, que se aleja bastante del original, Buddi tiene un aspecto más humano, aunque con ojos rojos y una sonrisa igualmente siniestra a la del muñeco que se hizo famoso a finales de los años 80.
Los mismos productores de la exitosa película It son quienes modernizaron y dan reinicio al mítico muñeco en esta producción que no cuenta con la aprobación oficial de su creador original, Don Mancini, quien actualmente está preparando una serie de televisión basada en el mismo juguete asesino.
Showcase, Hoyts, Village, Monumental
Viaje al cuarto de una madre
Leonor se quiere ir de su casa pero no se anima a decírselo a Estrella, su madre. De este modo, madre e hija tendrán que afrontar esa nueva etapa de la vida en la que su mundo en común se tambalea. Se trata del tema central que plantea la novel producción española Viaje al cuarto de una madre, que se suma a los estrenos de este jueves y que cuenta con las actuaciones de las destacadas Lola Dueñas y Anna Castillo, junto a Pedro Casablanc, bajo la dirección de la debutante Celia Rico Clavellino.
Drama de interiores realizado en coproducción entre Francia y España, el film se mete de lleno con un tema complejo vinculado a la delicada relación entre madres e hijas.
Leonor se prepara para marcharse de la casa en la que vive con su madre para empezar a trabajar, pero no sabe cómo se lo va a decir. Por su parte, Estrella teme por lo que será de su hija cuando se vaya de su casa, aunque es consciente de que no puede retenerla a su lado para siempre. Es así como el estrecho vínculo que hay entre ambas se pone en discusión y las obliga a adaptarse a esta nueva etapa en la que una inicia una nueva vida y la otra debe sobreponerse a la soledad y entender que, en este caso, querer significa dejar ir.
“Aunque es ley de vida que llegue la hora de que los hijos abandonen la comodidad del hogar paterno, no existe una única forma para afrontar este traumático momento”, destacan desde la producción del film como una idea que sirve a la novel directora Celia Rico Clavellino como punto de partida para su ópera prima, un conmovedor drama que indaga en la relación de una madre con su hija, a veces confortable y a veces asfixiante, que está a punto de cambiar para siempre con la independización de la joven.
A diferencia de la mayoría de films que abordan este hecho trascendental, Viaje al cuarto de una madre no sólo se centra en las emociones del que se marcha, sino también en el vacío que deja en aquellos que se quedan.
El Cairo
El verdadero amor
El verdadero amor, comedia dramática realizada en coproducción entre Francia y Bélgica dirigida por Claire Burger, con las actuaciones de Bouli Lanners, Justine Lacroix, Sarah Henochsberg, Cécile Rémy-Boutang, Antonia Buresi, Célia Mayer, Lorenzo Demanget, Tiago Gandra y Laure Ballarin, entre otros, se suma a la lista de estrenos de la semana.
Desde que su esposa se fue de la familia, Mario, el protagonista de esta historia, crió a sus dos hijas. Frida, de 14 años, lo culpa por la partida de su madre, al tiempo que Niki, de 17, sueña con la independencia. Mientras tanto, Mario, que tiene que lidiar con la crianza de las hijas y la continuidad de la complejidad familiar espera que su esposa regrese a casa alguna vez.
Es así que, para tratar de rearmar su vida, se suma a un grupo de teatro comunitario, pero se nota que el asunto no es para él y no es raro preguntarse porqué se metió ahí. La respuesta llega rápido: allí trabaja su ex mujer como iluminadora. El dato enciende las alertas, dado que en los tiempos que corren es fácil sospechar que Mario es posesivo y acosador. Y lo es, aunque también es cierto que no hay en su actitud ni maldad ni premeditación, sino que de golpe se quedó solo y con un amor que se esfumó y ya no es correspondido.
“La película explora el amor en todas sus formas. Cada personaje encarna una actitud diferente al amor en un momento crucial de sus vidas”, dijo la directora en una serie de notas de prensa con motivo del estreno del film.
“Es una película sobre el amor, pero también sobre el poder, el territorio, sobre la reconquista y la deserción”, completó. Y cerró: “Mario no está solo luchando por preservar o forjar lazos. Niki y Frida también están en esa búsqueda, en un momento de plena agitación adolescente que trastornará aún más el equilibrio familiar”.
Con un importante recorrido por festivales, la película, estrenada originalmente en Europa en 2018, recibió en el Festival del Cine de Venecia el premio Fedeora al tiempo que tuvo su paso por los festivales de Glasgow, Gotemburgo y Zurich.
Del Centro