Esta mañana se hallaron tres personas muertas entre los escombros de los edificios derrumbados ayer en Río de Janeiro.
El primer cuerpo encontrado es el de un hombre identificado como Celso, mientras que los otros dos cuerpos aún no fueron identificados, informó en su edición on line el diario O Globo de Brasil.
Antes del hallazgo, Eduardo Paes, alcalde de la ciudad, había anunciado a la prensa que los equipos de rescate buscaban a 19 personas que fueron reportadas como desaparecidas y podrían encontrarse bajo los escombros, según consignó un despacho de la agencia DPA.
Asimismo, Paes confirmó que cinco personas fueron trasladadas a hospitales.
Desde los equipos de rescate afirmaron que hay escasas posibilidades de encontrar a más sobrevivientes.
Todo comenzó alrededor de las 20.30 hora local (21.30 hora Argentina) cuando la mayoría de los ocupantes de los tres edificios -uno de 20 pisos, uno de diez pisos y otro de cuatro- ya habían abandonado el lugar, lo que evitó una tragedia aún más grave.
Dos edificios, el mayor y el más pequeño, están ubicados en la Avenida 13 de Mayo, mientras que el tercero está en la calle Manoel de Carvalho.
Las causas del triple derrumbe se desconocen todavía, pero según el alcalde está virtualmente descartada la hipótesis de que un escape de gas haya causado una explosión.
Las investigaciones se concentran principalmente en la posibilidad de problemas estructurales de las construcciones, ubicadas en una calle vecina a la plaza Cinelandia, que alberga a algunos de los más importantes monumentos arquitectónicos de Río, entre ellos el Teatro Municipal y el Museo Nacional de Bellas Artes.
Por seguridad, las autoridades cerraron el acceso del público a varias calles vecinas del lugar de la tragedia e interrumpieron durante algunas horas el tráfico de tres estaciones de trenes subterráneos, que se reanudó en la mañana de hoy.
