El director nacional Electoral, Alejandro Tullio, señaló hoy que «quemar urnas no es fraude» sino que configura «otro delito, porque no altera el resultado», al referirse a la controversia por las irregularidades ocurridas las elecciones en Tucumán.
«Para que haya fraude tiene que haber un conjunto de maniobras ilegales cuya finalidad sea alterar el resultado electoral», declaró el funcionario en diálogo con radio Del Plata.
Tras sugerir la realización de «elecciones complementarias» en las mesas donde se reportaron los incidentes, Tullio explicó que «lo que sí seria fraude es si hubiera sustitución de urnas o de sobres dentro de la elección y en las presentaciones realizadas no habría ninguno de estos casos».
Hasta ahora nada indica que pueda haber una acción de fraude en términos técnicos», agregó.
Tras lamentar la «quema de urnas», a la cual definió como «un hecho inaceptable que solamente perjudicaba a los electores involucrados», Tullio destacó que la elección en Tucumán «se ha salido de cauce».
En ese orden, remarcó que en Tucumán ocurrió una «bifurcación: por un lado, hay un proceso electoral, y por el otro, un proceso político que salió de cauce y esto enturbia la percepción de la ciudadanía respecto de la transparencia de las elecciones».
