A un año de la aprobación de la ley de interrupción voluntaria del embarazo -IVE-, en diálogo con El Ciudadano Paola Gross, directora del programa de Salud Sexual, Reproductiva y Diversidad del Ministerio de Salud provincial, informó cómo se trabajó durante 2021 en el sistema público, haciendo foco en las Interrupciones Legales del Embarazo -ILE- más que en las IVE (las ILE son aquellas gestaciones de más semanas que las permitidas por IVE y que contemplan la salud de la persona gestante y si el embarazo fue producto de una violación).
También destacó el valor de contar con un laboratorio público provincial que produzca la medicación que se utiliza en el país para estas prácticas, el misoprostol. Contó que Nación está gestionando la aprobación de mifepristona, una droga recomendada por la Organización Mundial de la Salud para utilizar de forma combinada con el misoprostol y garantizar así abortos más seguros y eficaces.
—¿Cómo evaluás la aplicación de la ley IVE en este primer año en la provincia?
En principio, con mucha alegría porque hemos podido avanzar en los territorios. Específicamente, pretendemos poder analizar la situación desde el ministerio más allá de los números, porque hay otro panorama, que tiene que ver con el acceso y ahora es poder monitorear la cantidad de efectores con equipos activos que pueden llegar a dar respuesta a las solicitudes. En este sentido la provincia tenía una concentración en la ciudad de Rosario y un equipo en la ciudad de Santa Fe que podía dar respuesta a lo que son las Interrupciones Legales de los Embarazos -ILE-, que ya veníamos trabajando antes de la ley. Lo que pudimos lograr es duplicar la cantidad de equipos que pueden dar respuesta a las interrupciones del segundo trimestre. Esto es un enorme avance porque permite descomprimir, había equipos que eran muy pocos con mucha demanda. Además, se aumentó en un 75 por ciento los profesionales que dan respuesta en general. El objetivo fue distribuirlos y que las personas no tengan que recorrer tantos kilómetros para encontrar la atención. Ese es uno de los objetivos que nos planteamos, en realidad, ya para el 2020 y creo que hoy haciendo un balance vemos el avance.
—¿Cuántos espacios se abrieron entre 2020 y 2021?
Cinco del segundo trimestre, o sea para ILE, porque la mayoría de las intervenciones se realizan en el primer nivel de atención, más de un noventa por ciento. En cuanto a los médicos que son los que llevan el registro de la medicación, que para todas las prácticas se requiere, aumentó un 75 por ciento si medimos el corte que teníamos en 2019 y el análisis que hicimos a mitad de 2021. Hay 75 por ciento más de equipos de salud que tiene posibilidad de llevarlos la práctica
—¿Hubo problemas en su aplicación por objetores de conciencia?
Lo real es que en efectores hay algunos que se declaran objetores desde hace mucho tiempo. Lo que intentamos hacer es lograr que el o la profesional que no puede garantizar la práctica, realice la derivación correspondiente en tiempo y forma con el respeto de la persona. Si bien no tenemos reclamos formales sabemos que siempre hay alguna situación que hay que mejorar en este sentido, particularmente cuando hablamos de los efectores de salud lo que hemos podido avanzar y por eso para el avance del segundo trimestre, requirió incorporar personal. Había equipos de ginecología obstetricia que no teníamos, que todo el equipo era objetores, entonces la única posibilidad fue incorporar personal. Se hizo esto y también estuvimos abocados reforzando lo que ya estaba. Pensando que el equipo está integrado por profesionales de distintas áreas, pero pensando en el recurso médico que es crítico y que es la posibilidad o no de dar respuesta de atención, lo que nos habíamos propuesto como objetivo para este año fue incorporar más profesionales médicos en cada equipo, en algunos ya lo logramos y en otros estamos trabajando para lograrlo.
—¿En qué regiones de la provincia hubo más problemas?
Para segundo trimestre que son la menor cantidad de atenciones pero son las más difíciles porque es donde no se encuentra resolución fácilmente. En la provincia contábamos con distintos efectores en dos regiones centrales. Hoy contamos con diez efectores distribuidos en cuatro regiones sanitarias con lo cual ahí vemos cómo pudimos avanzar en el norte de la provincia que estaba desprovisto de equipos.
—¿Hubo un aumento de consultas desde la aprobación de la ley?
En cuanto a los llamados del 0800-222-3444 de Salud Sexual, que la recordamos porque es una línea segur y creemos que sigue siendo necesario visibilizarlo la comunidad, cuando inicia el ASPO en marzo del año pasado las consultas empezaron a crecer. Nosotras nos propusimos también poder difundir la línea, las organizaciones también, tenemos material gráfico que ayudan mucho en este sentido y los llamados crecieron muchísimo pero éramos una provincia que tenía muy pocos llamados al 0800 porque había otras redes de acompañamiento que precisamente lograban que las personas accedan. Con el aislamiento y con las dificultades que imprimió al sistema de salud en su conjunto el aislamiento y los cuidados que tuvimos que adoptar como sociedad, básicamente la línea nos sirvió muchísimo para que las personas puedan consultar por si tenían dudas, si podían salir sin turno o si las paraban por la calle. Ahí sí, antes de la ley, los llamados se dispararon, hoy está estabilizada la cantidad llamados pero también vemos que el sistema fluye mucho mas, que no hay tantas consultas de equipos para las derivaciones porque fluye mejor y , los profesionales saben a que efector hacer las derivaciones. Se ha avanzado mucho.
—La mifepristona es un medicamento recomendado por la OMS para abortos más seguros y eficaces, en Argentina todavía no se aprobó , ¿en qué situación se encuentra?
Efectivamente, no hay venta todavía de esta medicación en nuestro país. No podemos ir ala farmacia y comprarlo porque no está disponible pero sí estuvimos trabajando junto a la dirección nacional de Salud Sexual y Reproductiva en función de una gestión de una donación deesta medicación para que las provincias podamos tenerla y priorizarla en quienes lo necesiten.
—¿Esta donación está trabada hace un tiempo?
Debería estar llegando en enero, según nos informaron en la ultima reunión federal que fue ahora el 21 de noviembre.
—¿Esa donación se podría utilizar aunque no esté aprobado por la Anmat todavía?
En realidad se va aprobar bajo una modalidad específica para que se pueda utilizar en casos del segundo trimestre
—¿Y en el primer trimestre que serían más casos de la IVE?
No, salvo casos muy particulares con antecedentes obstétricos que requieran una atención. No es necesaria la medicación, se prioriza en las gestaciones más avanzadas.
—Entiendo que sobre todo se necesita en segundo trimestre pero que en realidad la combinación de mifepristona y misoprostol garantiza más seguridad en cualquier tipo de aborto
Sí, no está contraindicado, todo lo contrario. Pero hasta que la medicación esté disponible para todo tipo de atenciones, vamos a trabajar de manera priorizada.
—¿Hay expectativas de que a mediano plazo haya se apruebe?
Sí, según estuvimos charlando con la directora nacional.