Un año después de ser rescatados de las profundidades de la tierra en Chile, los 33 mineros volvieron a la mina San José, ya sin ese “halo” heroico que los cubría. Golpeados y sin empleo, hoy enfrentan la odisea de sobrevivir al olvido. En el ámbito político, el panorama también es desalentador para el presidente Sebastián Piñera, que de conseguir entonces altos picos de popularidad, hoy cuenta sus horas más bajas.
El 13 de octubre de 2010 lograron salvar sus vidas tras 70 días en las profundidades pero los problemas están lejos de difuminarse. Después de la supervivencia, “los33”se convirtieron en deidades gracias a la excesiva atención que recibieron de los medios de comunicación de todo el globo. Toda esa atención desapareció tras el apagón informativo después del rescate. La mayoría pelea hoy por superar los traumas físicos y psicologócicos provocados por la experiencia y la mayoría no tiene trabajo debido a que por sus condiciones mentales no está apta para hacerse cargo del puesto. Por lo pronto, esperan con paciencia el resultado del juicio a los propietarios de la mina, aunque se espera que el proceso concluya de aquí a meses, si no años.
“Los 33 estamos en lo mismo, sin trabajo”, se lamentó Carlos Mamani, el único extranjero del grupo atrapado. “Algunos se mantienen dando charlas para motivar a la gente y otros estamos esperando las oportunidades”, indicó. Las penurias económicas también afectan a Pedro Cortés, que tiene 27 años y una hija. “No he recibido ninguna ayuda, no tengo seguro de salud ni pensión”, indicó Cortés.
Hay también quien ha vivido un infierno personal. Es el caso de Edison Peña, famoso por sus imitaciones de Elvis Presley y porque hacía deporte dentro de la mina San José para soportar el encierro. Peña, que fue internado en un centro de rehabilitación, relató al diario local El Mercurio que la fama acrecentó sus problemas con las drogas y el alcohol, y que a pesar de que ganó mucho dinero con las entrevistas exclusivas y los derechos de autor ahora está en la miseria. Por lo pronto, los 14 mineros de más edad recibieron a finales de agosto una pensión equivalente a 540 dólares mensuales que les permitirá jubilarse.
Hace doce meses, los funcionarios públicos se peleaban por aparecer en la foto con los mineros, pero este jueves a la conmemoración sólo asistieron la primera dama Cecilia Morel y el actual ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, quien encabezó las labores de rescate cuando era titular de Minería.
El presidente vio desaparecer el impacto favorable que había tenido aquella hazaña. Aquel pico de popularidad –que trepó al 56 por ciento– se ha derretido por la falta de resolución a la crisis educativa, impulsada por los alumnos que desde hace medio año piden educación gratuita: apenas cuenta con el apoyo del 28,8 por ciento de los chilenos.
“Aunque hay que destacar la audacia que tuvo el presidente Piñera para jugarse todas las cartas para que esa situación llegase al feliz éxito que tuvo, el rescate ocurrió hace un año y no se puede vivir toda la vida de él; los éxitos hay que acumularlos en el marco de otras acciones”, señaló a medios internacionales Francisco Celedeón, consultor en estrategias comunicaciones y presidente de la empresa ICC Crisis.
Por su parte, Carlos Huneeus, director del Centro de Estudios de Realidad Contemporánea (CERC) subrayó: “Piñera no supo mantener esta popularidad porque no tradujo en políticas específicas las promesas de identificarse con las necesidades de los trabajadores”.
A pocos días de conocerse la tragedia, Piñera anunció que su gobierno realizaría una completa revisión y reformulación de las condiciones laborales en Chile, aunque hasta ahora no ha habido progresos en la materia. Manuel Ahumada, líder dela Confederaciónde Trabajadores del Cobre, recordó que a un año del rescate, en Chile, ha habido alrededor de “18 muertos en accidentes” laborales. Esto quiere decir que “no ha existido cambio de fondo. El cobre chileno sigue manchado de sangre”.
Asimismo, recordó que el jefe de Estado también prometió “ratificar el convenio 176 de la OIT (Organización Internacional del Trabajo) sobre minería, convenio que de alguna manera te instala ciertos procedimientos para que se pueda abrir la explotación de algún yacimiento. Hasta el día de hoy son cuestiones evasivas”, concluyó.