El ex prefecto Mauricio Marionsini, que fue detenido hace dos días en la zona de la estación de ómnibus Mariano Moreno sospechado de matar a su madre y a la pareja de ésta, fue imputado este jueves por el fiscal Alejandro Ferlazzo. Con la descripción de una escena espeluznante, el fiscal relató cómo este hombre quedó filmado al momento en que mataba a puñaladas a las víctimas, limpiando el lugar e intentando ocultar los cuerpos. El móvil está vinculado a la violencia que el sospechoso ejercía sobre su madre y a una cuestión económica, dijo el funcionario que lo acusó por los delitos de homicidio calificado por ensañamiento y alevosía. Respecto a su madre agregó los agravantes del vínculo y de femicidio. Quedó preso preventivamente por el plazo de ley, es decir máximo de dos años y fue catalogado por el Servicio Penitenciario como preso de alto perfil.
La Fiscalía contó que eran cerca de las 3 del sábado pasado cuando cometió el doble crimen en una casa ubicada en Vera Mújica al 4800. La relación del hijo con su madre era de violencia, los vecinos contaron al fiscal que hubo hechos previos de amenazas y agresiones hacia la mujer, en una oportunidad debió intervenir personal policial. Ferlazzo dijo que los testimonios hablan de violencia física, verbal, simbólica y económica.
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Para el funcionario el crimen fue rústico pero premeditado: el agresor esperó hasta las 3 del sábado para que la mujer cerrara su almacén que está delante de la vivienda. La esperó en una especie de pasillo cerca de la puerta que conecta el negocio con la cocina de su casa. Tamara Marionsini tenía 53 años, apenas apagó la luz y cruzó el umbral fue atacada. Ferlazzo contó que el acusado apuñaló con un cuchillo a su madre de manera intempestiva en distintas partes del cuerpo.
Tras recibir múltiples puntazos la mujer quedó malherida en el almacén y el agresor se dirigió hacia el dormitorio donde estaba durmiendo Silvio Martini (63), pareja de su madre. El hombre contaba con heridas defensivas en brazos y manos. Tras atacarlo, el agresor corrió nuevamente donde estaba Tamara para seguir asestándole puntazos y golpes.
Luego la arrastró desde el almacén hasta el comedor. Mientras tanto, Silvio bajó como pudo de la cama y se arrastró hasta el comedor, donde el agresor siguió apuñalándolo. «Aún con ambas víctimas con vida, tomó un elemento y se dirigió hacia su madre, realizando maniobras en la zona de rostro-cuello, logrando su fallecimiento. Luego, realizó la misma maniobra con Silvio Martini provocando su fallecimiento”, contó Ferlazzo tras la audiencia.
Después del doble crimen
Luego de matar a Tamara y Silvio el agresor sacó dinero de la caja registradora del negocio y los celulares de las víctimas. El fiscal contó en conferencia de prensa que los teléfonos no fueron hallados aún y no se pudo determinar en qué utilizó el dinero sustraído.
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También se cambió la ropa, el imputado vivía en la casa de la planta alta de la propiedad, y limpió la sangre que estaba esparcida por la vivienda de su madre.
El fiscal dijo que la limpieza del lugar era algo muy difícil por las características del caso, tapó los cuerpos con bolsas grandes, intentó esconderlos en la medida de las posibilidades. El de Tamara lo dejó detrás del negocio y el de Silvio lo trasladó en esas bolsas cruzando el patio posterior y lo dejó en un cuarto que hay en el lugar.
Puso en el lavarropas sábanas y ropa ensangrentada y usando el celular de su madre se comunicó con los empleados para que no fueran a abrir el negocio, también lo hizo con algunos vecinos haciéndose pasar por su madre pero la forma de escritura levantó sospechas y cerca de las 19 dieron aviso al personal policial. Cuando los policías llegaron, el agresor escapó por los techos.
Alevosía
«Tenemos registros fílmicos de casi la totalidad de la escena y de lo que pasó posteriormente. Creemos que fue un ataque que fue alevoso por la indefensión que tenían las víctimas”, dijo Ferlazzo y agregó que los ataques fueron de manera sorpresiva y sin posibilidad de defensa.
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«Pudimos reconstruir muchas de las cosas que hizo porque quedaron registradas en las cámaras de seguridad», sumó el fiscal para remarcar que «tenemos registros de casi la totalidad de la escena y de lo que pasó con posterioridad a los crímenes».
Respecto al móvil explicó que por algunos testimonios, los pesquisas determinaron que el detenido venía teniendo problemas con su madre, quien recibía insultos, amenazas, malos tratos hacia Silvio y cuestiones que pueden tener que ver con los bienes.
«Tomamos conocimiento que la pareja se iba a casar en el mes de marzo y el hijo no estaba de acuerdo, y eso hacía al manejo de los bienes, especialmente al inmueble en el que vivían», detalló el fiscal.
Ferlazzo también hizo hincapié en que «la propia mecánica de la acción nos demuestra una violencia desigual, una situación de vulnerabilidad de la madre del imputado a partir de violencia previa, no solo física sino también amenazas, violencia verbal, simbólica y económica conforme a lo que hemos reconstruido».
El fiscal imputó a Mauricio Marionsini por los delitos de homicidio calificado por ensañamiento y alevosía respecto a ambas víctimas, y sumó los agravantes por el vínculo y en un contexto de violencia de género en relación a su madre (femicidio).
Tras escuchar a las partes, el juez Rodrigo Santana tuvo por formalizada la imputación y dictó la prisión preventiva del imputado por el plazo de ley.