La detención de un utilitario en un procedimiento de rutina, en el que se detectó medio kilo de marihuana, y se detuvo a un empleado de la Empresa Provincial de la Energía, derivó en dos allanamientos en un barrio privado donde vivía el sospechoso. En su casa se encontró un vivero donde ya no había nada, pero se sospecha que lo levantaron antes de que llegara la Policía. En tanto, en la casa de un familiar, en el mismo barrio, se encontraron tres kilos de cogollos, valuados en 3 millones de pesos, y casi un millón de pesos en efectivo.
El martes pasado, personal de la Policía Federal se encontraba haciendo un procedimiento de control vehicular en la intersección de la ruta provincial 1 y la ruta nacional 168 cuando detuvieron un utilitario con dos ocupantes. Uno de los perros rastreadores detectó que había alguna irregularidad y tras una requisa el personal policial encontró medio kilo cogollos de marihuana, según publicó Aires de Santa Fe. Dieron aviso a la Justicia federal y los ocupantes fueron detenidos, uno de ellos es Damián B., empleado de la EPE.
Esta situación derivó, por orden del juez federal Reinaldo Rodríguez, en un allanamiento a su casa, ubicada en Los Eucaliptus 4500 en el barrio privado Aldea Setúbal, donde se encontró un vivero que estaba vacío y se investiga si lo levantaron tras la detención del empleado.
Al día siguiente se hizo un nuevo operativo en el barrio, pero en la casa de un familiar del empleado de la EPE, donde se secuestró marihuana y una fuerte suma de dinero en efectivo.
El empleado fue indagado en el fuero federal por el delito de violación a la ley de estupefacientes 23.737 y quedó detenido.
