Los presidentes de los países del Mercosur se reunirán este martes en Montevideo sin grandes posibilidades de adoptar decisiones, en espera de la asunción del ultraderechista Jair Bolsonaro en Brasil, quien anunció que podría retirarse del bloque.
Brasil, el socio mayor del acuerdo que completan la Argentina, Paraguay y Uruguay, cambiará de gobierno el primero de enero, y el Mercosur está en la lupa del nuevo mandatario de ultraderecha.
«La expectativa real será cuando el (nuevo) gobierno de Brasil asuma y se pregunte qué va a hacer en materia de apertura comercial», resumió a la AFP el economista uruguayo Ignacio Munyo, quien dirige el centro de investigaciones de la Escuela de Negocios de la privada Universidad de Montevideo.
«Brasil realmente necesita abrirse comercialmente y bienvenido sea. El objetivo general del Mercosur debería ser converger hacia un acuerdo de libre comercio entre los países», concluyó.
Amenaza y oportunidad
Bolsonaro dio señales claras de que revisará los acuerdos del Mercosur y amenaza con retirarse del bloque si no hay mejoras que favorezcan al sector productivo brasileño.
«Brasil trata de fortalecer el Mercosur y decir lo que quiere o, en un caso extremo, se retira. Pero no debe continuar como está. Es desventajoso para nosotros», le dijo al diario O Globo en noviembre la futura ministra de Agricultura, Tereza Cristina.
«Es el momento de sentarnos y revisar el Mercosur. Sin dejar el protagonismo de Brasil y sin dejar de tener relaciones con nuestros vecinos, pero haciendo un acuerdo, tal vez, más moderno y mejor», agregó.
Para el director del Departamento de Negocios Internacionales e Integración de la Universidad Católica del Uruguay, Ignacio Bartesaghi, la postura de Brasil abre una «oportunidad» para modernizar la actual unión aduanera.
«El bloque sigue teniendo un estancamiento en normas de comercio, no tenemos más integración que hace 10 años», sostuvo.
Por eso la tesitura brasileña es una «gran oportunidad» para el Mercosur. «La amenaza de que Brasil se vaya del Mercosur no es creíble» pero puede llevar al bloque hacia «una idea inicial que tenía (el presidente argentino Mauricio) Macri, que era modernizarlo», explicó.
El escenario podría ser el de un Brasil más cerrado «y los demás socios más libres» para negociar acuerdos por su cuenta, que es lo que, por ejemplo, demanda Uruguay, argumentó Bartesaghi quien coincidió con Munyo en que el Mercosur, fundado en 1991, se debe «reformular».
La estructura del acuerdo no permite que los miembros del Mercosur negocien tratados comerciales sin la anuencia de los demás socios.
El lejano acuerdo con la UE
Aunque de un lado y de otro los responsables de las negociaciones de un tratado de libre comercio Mercosur-UE anuncian la inminente conclusión de las tratativas, la llegada de Bolsonaro a poder terminó de sembrar las dudas sobre el camino que tomarán estas negociaciones que comenzaron hace 20 años.
Durante el reciente G20 en Buenos Aires, el presidente francés Emmanuel Macron dijo que ese pacto aún está lejos de concluirse, en una entrevista con el diario argentino La Nación.
«Francia está a favor de un acuerdo comercial de mutuo beneficio entre la UE y el Mercosur. Tenemos, como en la Argentina, sensibilidad agrícola, especialmente en el sector vacuno francés.
En muchos temas se lograron progresos estos últimos meses, pero no estamos aún en situación de concluir» un acuerdo, explicó el mandatario.
La comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, insinuó que las tratativas necesitan un «impulso final».
Pero Macron relativizó esa visión al referirse a la llegada del ultraderechista Bolsonaro a la Presidencia brasileña.
«Francia mantiene una importante alianza estratégica con Brasil y deseo que esta continúe así, en el marco de los valores democráticos. Esta nueva realidad política en Brasil suscita preocupaciones fuertes. Es probable que tenga repercusiones sobre las discusiones comerciales entre el Mercosur y la UE», expresó el presidente francés.
Bolsonaro tiene un historial de declaraciones que lo presentan como un proteccionista. Sus planes en materia comercial son, de momento, una incógnita.
Este martes los presidentes del Mercosur despedirán al brasileño Michel Temer y el uruguayo Tabaré Vázquez traspasará la presidencia rotativa del bloque a su colega argentino, Mauricio Macri.