Al menos cuatro personas fueron asesinadas este martes a balazos por un desconocido que ingresó disparando con dos armas a la Catedral de Campinas, en el interior del estado brasileño de San Pablo, durante una misa y luego se suicidó.
La masacre fue perpetrada durante la misa del mediodía y el asesino disparó al menos 20 tiros, para luego suicidarse cerca del altar, tras haberse tiroteado con la policía.
Se desconoce la motivación del homicida, dijo un portavoz de los bomberos de Campinas, ciudad ubicada a 100 kilómetros de San Pablo.
Otras tres personas se encontraban heridas. Según testigos, el asesino ingresó tranquilamente a la misa y permaneció sentado durante un tiempo. En un momento, se levantó y comenzó a disparar a mansalva, tras lo cual varios policías llegaron al lugar alertados por los tiros.
«Aparentemente efectuó disparos en varias direcciones y no hacia alguien específicamente», afirmó el mayor Adriano Augusto, de la Policía Militarizada de Campinas.