Un muchacho de 20 años fue condenado en un juicio abreviado a 6 años y medio de cárcel por balear y robarle su arma reglamentaria al comisario inspector Marcelo Gómez, actual subjefe de la Unidad Regional II, en mayo de 2014. El joven admitió haberle disparado al uniformado en medio de un asalto en al autopista Brigadier López, en Granadero Baigorria. De acuerdo con fuentes del caso, la Policía lo encontró porque el muchacho hizo alarde entre sus vecinos de haberle robado la pistola “a un cobani”.
Al Finito Sosa lo arrestaron el 20 de mayo de 2014 en Montevideo al 1300, del barrio baigorriense de Salsipuedes. Los policías de la ciudad vecina lo buscaban desde una semana antes, por haber herido a su jefe, el entonces inspector de zona Marcelo Gómez.
El asalto
Según lo que pudo reconstruir el fiscal Fernando Dalmau, el lunes 12 de mayo a la tardecita el Finito se metió en problemas serios. Junto con el Gordo Larry –llamado Fabio A.– y un adolescente intentaron asaltar a un grupo de personas que estaban paradas, junto a dos autos, a la altura del kilómetro 3,5 de la autopista Rosario-Santa Fe.
Los muchachos llegaron al lugar en moto, uno de ellos armado, y sorprendieron a dos hombres y una mujer que estaban revisando el motor de uno de los vehículos. El trío de ladrones redujo con velocidad a Raquel V., de 52 años y a Héctor C., de 56, dos santafesinos que estaban llegando a la ciudad; pero se llevó terrible sorpresa con el restante asaltado: era el inspector Gómez, el responsable de la seguridad de Granadero Baigorria y zonas aledañas, quien se había detenido cuando vio el auto descompuesto de la pareja.
De acuerdo con los dichos de las víctimas, cuando Finito, el adolescente y el Gordo Larry reconocieron al policía se sobresaltaron. Hasta ahora no está establecido cuál de los tres empuñaba el arma, pero sí que el pistolero reaccionó y le metió un tiro en la pierna a Gómez. Luego, le robaron el arma reglamentaria al uniformado, los celulares y las billeteras a los santafesinos y se fugaron de la escena del asalto.
El herido fue trasladado al hospital Eva Perón, donde le diagnosticaron herida de arma de fuego en la pierna izquierda. Quedó internado algunos días, fuera de peligro.
El dato
Al momento del asalto el oficial logró reconocer al Gordo Larry y al adolescente que lo acompañaba. Sin embargo Finito cayó preso por bocón. Según fuentes del caso, el muchacho, luego del robo, se ocupó de que sus vecinos de barrio Salsipuedes se enteraran de que él era la persona que le había sacado la Browning 9 milímetros reglamentaria a la autoridad policial más importante de su ciudad. Al parecer el rumor corrió rápido por la zona y llegó a los oídos de los uniformados de la comisaría 24ª, que lo fueron a buscar y lo encontraron el 20 de mayo de 2014.
El abreviado
Desde entonces Finito, que se llama Pablo Leonel Sosa, estuvo preso en Granadero Baigorria. La investigación quedó a cargo del fiscal de Investigación y Juicio Dalmau, que encontró pruebas concluyentes sobre el hecho. Sin embargo el acusador y el abogado defensor de Finito, Carlos Varela, llegaron a un acuerdo y abreviaron el proceso legal, con el aval del juez Alejandro Negroni. Así fue como el 26 de febrero pasado el muchacho fue condenado a 6 años y 8 meses de prisión por robo calificado, agravado por la participación de un menor de edad.
Según contó Dalmau a El Ciudadano, el Gordo Larry también está detenido. El juicio en su contra tendrá en los próximos días la audiencia preliminar, donde el fiscal adelantará el monto de la pena que pedirá en el debate. En tanto, la situación del adolescente se sustancia en el fuero de Menores.
