Se abrió la inscripción para una nueva edición del taller de videojuegos para niñas y niños, de 10 a 14 años. Se trata de la cuarta edición del año, que se hará con modalidad online debido la pandemia del coronavirus. Quienes quieran inscribirse, deberá completar un formulario en rosario.gob.ar. Las clases comenzarán el 6 de octubre.
El primer taller del año se hizo este verano 2020, de manera presencial, pero desde abril el cursado se adaptó por la pandemia y pasó a dictarse en forma online. De la segunda edición, participaron más de 150 chicas y chicos; y la tercera tuvo un récord de inscriptos con más de 350 personas que se sumaron a este desafío.
Las clases se dictaron en vivo por Twitch, dos veces por semana y se usó la plataforma Construct3 para enseñar a crear videojuegos: tiene como ventaja editar en línea sin instalar ningún programa en la computadora. Otro de los soportes que usaron los profesores fue Google ClassRooms, el aula virtual gratuita que aloja todo el contenido de las clases, información adicional y actividades extras.
Espacios para la creatividad
Los talleres de creación de videojuegos, parten de un interés preexistente en muchas niñas y niños que encuentran en el uso de este tipo de lenguaje una práctica cotidiana, tanto con fines de esparcimiento individual como para la integración en comunidades, intercambio de experiencias y encuentro con sus pares mediante juegos en línea.
La capacitación, permite incorporar activamente esta tecnología, no solo en el rol de jugador, sino como un creador capaz de desarrollar nuevas dinámicas, escenarios, personajes y modos de juego.
La planificación del taller incluye las siguientes etapas: diseño del juego; programación; arte del juego; sonido y musicalización. Para ver los juegos en línea, pueden ingresar a: https://tallercreacionvideojuegos.itch.io/
Experiencias
“El personaje principal de mi videojuego se llama Hada Curiosa, tiene dos elementos que usa para sortear las dificultades y pasar al siguiente nivel: un libro, que tiene que consultar para aprender ciertas cosas de la naturaleza, y una lupa, que le sirve para explorar y hacer fuego”, relató Sara, sobre su creación.
Por su parte, Amanda contó: “A mí no me gustan las armas ni las guerras, por eso en mi juego nadie tiene que disparar ni matar. Tenés que recolectar patitos que están perdidos y devolverlos a su hábitat natural”.
“Siempre quise crear mi propio videojuego y hasta ahora no sabía cómo hacerlo. Ahora ya sé. Voy a seguir aprendiendo todo lo que se pueda con el profesor Gregorio porque explica muy bien, las clases son divertidas y conocés muchos nuevos amigos”, dijo Bruno.