Un pescador de la isla francesa de La Reunión, donde la semana pasada hallaron restos de un Boeing 777 similar al avión de Malaysia Airlines que desapareció en marzo de 2014, encontró hace dos meses un asiento y varias valijas que podrían pertenecer al vuelo MH370, pero las quemó porque era su «trabajo», según trascendió hoy.
El pescador reunionense Nicolas Ferrier dijo al diario británico «Daily Telegraph» que a comienzos de mayo, durante una de sus rondas diarias en esa isla del océano Índico, encontró dos valijas llenas de ropa y un asiento azul que podría ser del Boeing 777 que desapareció el 8 de marzo del año pasado con 239 personas a bordo.
«No fue hasta el lunes pasado que me di cuenta de lo que podría haber sido. Probablemente sería del avión. Encontré también un par de maletas llenas de ropa, pero las quemé. Ese es mi trabajo: recoger la basura y quemarla», explicó Ferrier, en declaraciones reproducidas hoy por la agencia EFE.
El enigma en torno al vuelo MH370 recobró protagonismo la última semana, con una sucesión de hallazgos tras 16 meses sin pistas relevantes.
Por un lado, el miércoles pasado en la misma Isla Reunión se encontró un fragmento de «flaperón», una superficie de control del avión situada en el ala que actúa como alerón y solapa, lo que fue el primer indicio tangible en 16 meses de que el avión se habría estrellado en ese océano.
Además, el jueves se halló en la misma isla un fragmento del ala, que ya se trasladó a Francia para examinarlo, y una valija muy deteriorada que será analizada en París por el Instituto de Investigación Criminal de la Gendarmería Nacional francesa (IRCGN).
El flaperón llegó el sábado a París y desde allí fue trasladado a Toulouse, donde será analizado por el laboratorio dependiente del Ministerio de Defensa y especializado en investigaciones técnicas sobre accidentes de aviones.
La investigación para determinar si ese fragmento pertenece al vuelo MH370 está a cargo de la Justicia francesa, que contará con la colaboración de expertos aeronáuticos galos y malayos, de representantes de las autoridades judiciales de Malasia y del fabricante aeronáutico estadounidense Boeing.
El peritaje no comenzará hasta este miércoles, aunque hoy se reunirán a puerta cerrada en París el juez de instrucción, los investigadores y los representantes malasios con el fin de coordinarlo.
El antiguo director de pruebas de la Dirección General de Armamento (DGA), Pierre Bascary, señaló en el diario «Sud Ouest» que con el número de serie, los planos del aparato y el material y el proceso utilizado en su fabricación, se debería poder confirmar rápidamente si pertenece al Boeing 777 de la aerolínea.
El ministro malayo de Transporte, Liow Tiong Lai, señaló ayer que ese fragmento de dos metros ha sido oficialmente identificado como un «flaperón» de un Boeing 777, pero de momento nada más lo vincula con el del MH370.
A las afueras de París, en el IRCGN, se examinará, por otra parte, un fragmento de valija hallado el pasado jueves también en La Reunión.
Malasia pidió ayer a las autoridades de los países del océano Índico cercanos a la isla que se mantengan alerta ante la posible aparición de nuevos restos.
El MH370 desapareció tan solo 40 minutos después de haber despegado de Kuala Lumpur con destino a Pekín, luego de que alguien apagara los sistemas de comunicación.
La investigación de la Fiscalía parisina contempla los cargos de homicidio involuntario y de presunta destrucción intencionada de ese aparato.