Un policía, de 37 años, quedó en prisión preventiva por perseguir y asaltar a un automovilista en el cruce de la ruta nacional 11 y 70, en la localidad de Recreo, del departamento La Capital. El robo ocurrió en febrero de 2019 y el uniformado junto a su cómplice fueron detenidos e imputados en esa fecha, pero quedaron en libertad.
Lo cierto es que cuando llegó la hora de la audiencia previa al juicio oral, la dupla no se presentó y se les dictó la rebeldía. La semana pasada el policía se presentó ante la Fiscalía y este domingo el camarista Jorge Andrés le revocó la morigeración de la prisión y dispuso que quedara detenido hasta el juicio oral. En tanto, su cómplice continúa prófugo de la justicia.
Los fiscales de la capital provincial Ezequiel Hernández y Mariela Jiménez están a cargo de la investigación por el hecho ocurrido el 9 de febrero de 2019 en el cruce de la ruta nacional 11 y la ruta provincial 70. Los imputados son un policía, identificado sólo por sus iniciales como DGMO, de 37 años y su cómplice es MMP, de 31.
De la pesquisa se logró reconstruir que pasadas las 6 de ese sábado 9 de febrero, el uniformado conducía un auto Peugeot con su cómplice como acompañante cuando en el cruce de las rutas que están a la altura de Recreo advirtieron la presencia del conductor de un Renault Clio y se le pusieron a la par.
«Luego de realizar maniobras bruscas y de que el acompañante –que no es oficial de Justicia– le apuntara con el arma de fuego reglamentaria calibre 9 milímetros del policía, la víctima fue obligada a detener la marcha y a bajarse de su auto”.
Apenas descendió, el uniformado le propinó tres golpes de puño en la cara, que le provocaron el quiebre del tabique y otras lesiones. “Los imputados le sustrajeron a la víctima 4 mil pesos”.
En medio del robo, apareció otro policía que estaba de franco y quien había visto la persecución en la ruta, las maniobras del vehículo y la agresión física sufrida por la víctima», indicaron los voceros para agregar que este uniformado llamó al 911 para pedir refuerzos.
Las irregularidades en la comisaría 16ª
En este punto, los fiscales hicieron hincapié en que “minutos más tarde, y a pesar de que ya había un móvil policial en el lugar, los uniformados les solicitaron a los imputados que fueran a la comisaría 16ª de Recreo, cosa que obviamente no hicieron y escaparon del lugar”.
Hernández y Jiménez señalaron que “el policía que fue testigo de lo ocurrido ayudó a la víctima a llegar a la 16ª, donde radicó la denuncia”.
El escándalo continuó en esa comisaría debido a que “mientras estaban confeccionando el acta, el policía imputado llegó al lugar y comenzó a insultar y a amenazar a su colega”, destacaron los funcionarios del MPA para remarcar que al final, la dupla fue detenida.
“Sin embargo, recuperaron su libertad en virtud de la resolución de primera instancia y ahora uno de ellos está prófugo”, recordaron los fiscales, quienes contaron que este último ya tenía otras causas abiertas por delitos similares.
Alcohol, cocaína y una causa en la Justicia Federal
De acuerdo con los voceros de la Fiscalía, cuando los detuvieron se les realizaron exámenes de orina y sangre a los dos acusados y a la víctima. “El policía dio positivo para cocaína y alcohol, mientras que el otro hombre dio positivo de cocaína”, informaron los fiscales en dicha oportunidad para señalar que la víctima dio negativo en las pruebas.
A estos resultados se sumaron las pericias a los celulares donde en uno de ellos se encontraron «fotografías de lo que podría ser cocaína y precursores químicos, así como recetas para la elaboración y corte de cocaína», y por ello hay una investigación abierta en la Justicia federal, explicaron.
La rebeldía
A más de un año del hecho, en junio pasado se iba a realizar la audiencia preliminar al juicio oral donde los fiscales pedirían la pena de 10 años de prisión para el uniformado y 8 para su cómplice.
Lo cierto fue que la audiencia se suspendió porque ninguno se presentó. “Por ese motivo, el juez Pablo Busaniche declaró la rebeldía de ambos imputados”, dijeron Hernández y Jiménez.
Fue en ese marco que la Acusación apeló la medida de libertad y la semana pasada el policía se presentó mientras que a su cómplice se le dictó un pedido de captura, ya que continúa prófugo, aportaron los voceros.
El camarista Jorge Andrés le dictó este domingo la prisión preventiva efectiva al uniformado que está acusado como coautor del delito de robo calificado (por la utilización de arma de fuego apta para el disparo y por ser personal perteneciente a una fuerza policial), concluyeron las fuentes.