La foto es el mensaje. Los ediles opositores Jorge Boasso (radical), Roy López Molina (del PRO) Osvaldo Miatello y Diego Giuliano (ambos del PJ) presentaron ayer un proyecto de ordenanza con el fin de darle una nueva regulación a toda la actividad nocturna de la ciudad. Entre lo más saliente, la propuesta destaca que no habrá lugares prohibidos para que funcionen bares y boliches, salvo en los casos en que estos últimos tengan más de 600 metros cuadrados. El otro hecho destacable es la idea de que los vecinos puedan manifestar su oposición vía e-mail a la radicación de una confitería bailable en su cuadra.
En tanto, la puesta en escena estuvo enmarcada por un notorio mensaje de unidad política que buscará sostenerse hasta el año próximo, cuando se realicen las elecciones municipales. La de ayer fue la primera de una serie de iniciativas y proyectos que los ediles encaran juntos de aquí en adelante.
La exposición se realizó por la mañana en el Palacio Vasallo. El proyecto de ordenanza se debatirá de aquí a fin año con los restantes bloques políticos y los empresarios del sector, quienes ayer mostraron cierto malestar por no haber sido consultados para la elaboración final y ser invitados sobre la hora a la presentación. Quienes la promueven pretenden que la normativa salga antes de enero.
De movida, la iniciativa plantea simplificar todos los rubros existentes en la actualidad a sólo dos para evitar que haya dificultades en el control municipal. Esas categorías incluyen locales con o sin actividad bailable. Así, desaparecerían las inscripciones de comercios como cantinas y peñas, entre otros rubros.
El texto también establece algunos aspectos puntuales en el llamado Registro de Oposición que se abre a los vecinos de la cuadra para el caso de los boliches bailables.
Si los habitantes de esa zona juntan el 33 por ciento de firmas contra el emprendimiento privado, el mismo no podrá comenzar a funcionar.
También se daría la posibilidad a los vecinos de que manifiesten su oposición vía e-mail, evitando así ir personalmente al municipio, como hasta ahora. “A eso le agregamos un registro móvil. La idea es facilitarle las cosas a los rosarinos y evitarle el trámite engorroso de ir al distrito a oponerse”, sostuvo Miatello.
De todos modos, el proyecto también incluye un elemento a favor de los empresarios: se elimina el veto que tienen en la actualidad los habitantes linderos (es decir, sólo los que están pegados al inmueble) para rechazar una confitería. “Nos llegó información de algunos actos de corrupción que no pudimos comprobar de personas que vendían su voto a partir esa posición de privilegio”, explicó, a su turno, Boasso.
Otro punto saliente de la iniciativa es que no modifican los horarios de funcionamiento de los boliches, que podrían seguir abiertos hasta las 5 y media de la mañana con media hora más de cortesía y bajando el nivel de sonido.
Sobre las zonas
En torno a las ubicaciones de los locales, sólo se planea obligar a los negocios con más de 600 metros cuadrados a radicarse en las llamados zonas de promoción, que entre otras incluye avenida Belgrano y Pellegrini, Circunvalación en alguno de sus tramos, el Parque Scalabrini Ortiz y la avenida Colombres. Los lugares que tengan menos de esa superficie podrían seguir funcionando donde están. En caso de mudarse, tendrán algunos incentivos fiscales y de habilitación para hacerlo.
Con todo, se permite además que locales abiertos para mayores funcionen en jornadas distintas para menores y reforzando medidas de seguridad. Actualmente hay una sola discoteca para quienes tienen menos de 18 años abierta, en calle Maipú al 1000.
El cambio que establece el proyecto de los ediles es que estipula dos categorías para habilitar sitios y horarios diferenciados: por un lado, boliches para chicos de 14 y 15 años podrán funcionar hasta la 1 de la mañana; en tanto, aquellos para menores de 16 y 17 años contarán con una hora más, hasta las 2. “Los adolescentes tienen hoy un tratamiento de expulsión. No hay que mezclar esos rangos, son edades distintas. Con esto ayudamos a los padres”, dijo Boasso.
La ordenanza también incorpora la categoría de bares culturales. El asunto responde a una demanda del sector y a la creciente cantidad de locales con números artísticos. Se busca que esos locales puedan abrir hasta las 2 de la mañana y tener un mínimo de 8 espectáculos mensuales.
Lo cierto es que la forma en que se diagramó y presentó la propuesta no cayó bien en los referentes empresarios del sector. Los que estuvieron en el lugar se enteraron allí del contenido del proyecto y fueron invitados el día anterior. “Es positivo que en el Concejo se empiece a discutir una nueva normativa. Pero es muy apresurado emitir un juicio valorativo porque nos enteramos anoche de la convocatoria qua había para hoy. La crítica tiene que ver con eso; primero informan a la prensa y después nosotros. La mecánica fue siempre al revés”, sostuvo Luis Corradin, titular del bar Berlín.
En tanto, desde el bar cultural Distrito 7 cuestionaron la “lógica” de la iniciativa.
“Seguir planteando la dicotomía de baile o no baile en un lugar es algo que criticamos siempre. En los espacios culturales hay una dinámica diferente. Por lo que vimos en principio el bar cultural estaría dentro de los lugares sin actividad bailable. Y eso sería una complicación porque a la hora de plantear espectáculos musicales es muy difícil plantear que no se pueda bailar”, dijo el representante de ese local.
La política como fondo
Lo cierto es que la presentación de ayer será la primera de una serie que los cuatro ediles planean realizar de aquí en adelante. La foto en conjunto marcó el inicio de una unidad política que buscará sostenerse hasta el año próximo. La idea sería entablar un gran acuerdo que establezca por consenso un candidato único para la elección municipal que se avecina.
El armado marca el alejamiento definitivo de Boasso del Frente Progresista y de sus compañeros de bloque María Eugenia Schmuck y Sebastián Chale. A la par, busca unir a los sectores del PJ más alejados del kirchnerismo “duro”, que tiene en Roberto Sukerman a su principal referente ya lanzado a la intendencia. Desde un principio Giuliano y Miatello fueron proclives a abrirse al diálogo con otros sectores políticos.
A ellos se suma el PRO, que en los últimos tiempos estuvo sondeando a algunas figuras del periodismo local para proponer como candidato propio al interior de este espacio.
Los puntos salientes
Simplifica toda la actividad en dos rubros: con o sin actividad bailable.
No habrá lugares prohibidos en la ciudad para que funcione un bar o un boliche, salvo aquellos que tengan más de 600 metros cuadrados.
Los vecinos podrán manifestar su oposición, vía e-mail, a la radicación de una confitería bailable en su cuadra.
Podrán permanecer abiertos hasta las 5.30 con media hora más de cortesía.
Los locales habilitados para mayores podrán funcionar, en otros días, para menores de edad.
Para menores de 14 y 15 años los boliches funcionarán hasta la 1 de la mañana; para los de 16 y 17, hasta las 2.
Los bares culturales podrán funcionar hasta las 2 y deberán ofrecer un mínimo de 8 espectáculos mensuales.