El fin de semana pasado, Peyrano se vistió de rojo y negro. En la entrada del pueblo en el que viven cerca de 2.600 personas y está ubicado a 70 kilómetros de Rosario, el camión de Bomberos Voluntarios esperaba para escoltar a la figura peyranense. En la puerta de su casa, vecinos se adelantaron al Carnaval y esperaron a su hija prodigio, la personalidad destacada, con espuma y carteles. El pueblo se revolucionó y festejó el logro de María Victoria Vives, la Tata, que volvió al lugar que la vio nacer con un papel firmado que la reconoce como trabajadora del fútbol, en un acto en el que la acompañaron Lucha Aymar y la Sole Pastorutti. En diálogo con El Ciudadano, Vives destacó que “la lucha es de todas”, recordó el partido despedida de Maxi Rodríguez, habló del ascenso a la máxima categoría de su club, Newell’s, y destacó la unión del grupo que logró subir a la Primera División del fútbol femenino de AFA.
Pasaron catorce años desde que Vives dejó Peyrano para asentarse en Rosario. Llegó a la ciudad para estudiar el Profesorado de Educación Física y se quedó. Si bien siempre vuelve a su casa natal, ahora lo hizo de una manera especial: es una de las futbolistas que firmó contrato con Newell’s. Es su primer vínculo contractual con el club en el que milita desde el año 2019.
Tata practicaba vóley en Peyrano, a pesar de que siempre le tiró más ir detrás de una número cinco. Su sueño era “jugar en un club”, al fútbol, por supuesto. Mientras veía a sus hermanos y amigos ir a entrenar y competir, ella fantaseaba con poder hacer lo mismo y “no ser juzgada”. El hecho de que una nena jugara al fútbol hace dos décadas era extraño, estaba mal visto. En un pueblo, aún más: “Se sufría mucho con el qué dirán”.
Sin ir más lejos, a la mamá de Vives no le gustaba que jugara al fútbol, pero rápido cambió de opinión: “Hoy en día lo disfruta y me acompaña siempre. En su momento era otra cultura, estaba mal visto que la mujer jugara a la pelota. Hoy la verdad es que estoy muy feliz de romper todo eso, de por poder lograrlo y estar donde estoy. Nunca imaginé que me iba a pasar esto”.
El comienzo del sueño
Cuando llegó a Rosario, Vives empezó a estudiar Educación Física y a la par comenzó con el fútbol. Primero llegaron los torneos de fútbol 5 y luego apareció Newell’s. Empezó a jugar Futsal en la Lepra y después se animó a cambiar a fútbol de campo, cuando tuvo mayor disponibilidad horaria. En 2019, tras la insistencia de su compañera Pamela Chindamo, se sumó al primer equipo del Rojinegro, que ese mismo año se consagró campeón del torneo organizado por la Asociación Rosarina.
El año del ascenso a la máxima categoría del fútbol femenino, Tata fue la capitana del equipo. Antes, durante todos los campeonatos de la Primera C y la Primera B de AFA, compartió la cinta con Chindamo.
En todos esos años, cuando volvía a Peyrano, era reconocida por los vecinos. Muchas niñas le escribieron porque querían jugar a la pelota y algunas están hoy en las divisiones inferiores de la Lepra.
“En 2019, cuando ganamos el campeonato de Rosarina, ahí ya arranqué con la gente saludándome, mandándome mensajes. Cuando empezamos a competir en AFA también. La gente me escribe, me manda mensajes lindos, se acuerda de cosas. Con todo esto, con el ascenso y ahora el contrato, la gente estaba enloquecida; me pasó que fui y me estaban esperando en la entrada del pueblo con los Bomberos. Jamás me lo hubiese imaginado, me da vergüenza porque soy muy tímida, pero me llena el alma. Recibí mucho amor y estoy muy agradecida de todo”, contó la defensora leprosa.
Una presentación con “mucho amor”
Tata Vives es una de las primeras futbolistas que juega desde 2019 en Newell´s y que firmó contrato con el club. Al ascender al torneo semiprofesional de AFA, es obligatorio que la institución vincule contractualmente a las futbolistas.
Su presentación fue una obra maestra del departamento de prensa del club del Parque: estuvieron Soledad Pastorutti, Luciana Aymar y Maxi Rodríguez.
“Fue muy lindo el video, siento que lo hicieron con mucho amor”, afirmó.
Con los tres compartió una tarde inolvidable cuando fue invitada al partido despedida de la Fiera en el Coloso Marcelo Bielsa. Además, con la Sole la une la infancia.
¡ ̃, !
María Victoria Vives, capitana de @NewellsFem, firmó su primer contrato profesional con el club.
¡Felicitaciones, Tata! ❤️ pic.twitter.com/CmQwmRJSLZ
— Newell’s Old Boys (@Newells) February 1, 2024
“Yo era fan de chica y el sábado que tocó en Cosquín miré la programación y mientras miraba decía: qué suerte la mía. De chica que era fanática de ella, tuve la suerte de poder compartir un día y que me acompañe en la presentación del primer contrato era un montón”, se emocionó.
Además de escuchar su música, Vives contó que cuando era chica y viajaba de Peyrano a Bell Ville a la casa de los abuelos, pasaba siempre por la puerta de la casa de Pastorutti en Arequito. Iba pegada a la ventanilla a ver si la veía. «Pasábamos por la puerta de la casa y mi papá siempre me decía: «Acá es la casa de la Sole»”.
“Una vez fue a Peyrano a un festival folklórico. Ese día llenó la plaza: no llegamos a tres mil habitantes y fueron como doce mil personas. Yo era chiquita y había ido con mi abuela”, recordó.
Esa historia se la pudo contar a la Sole cuando la conoció en la despedida de Maxi Rodríguez.
Un llamado muy especial
Vives ya lo sabía, pero restaba la confirmación. Iba a jugar en el partido despedida de Maxi Rodríguez en el Coloso y rodeada de los mejores futbolistas del mundo. Como ella, estuvieron invitados Lionel Messi, Angel Di María, Lionel Scaloni y muchísimas figuras más.
“En la semana previa al partido me avisan que Maxi me iba a invitar, pero era un rumor, no se confirmaba”, contó. Una tarde, él le escribió un mensaje presentándose y pidiéndole un minuto para llamarla: “Ahí estuvimos hablando, me invitó y me dijo que iban a estar la Sole, Mariana Larroquette y Lucha Aymar y que tenía que llevar los botines y pasarla bien”.
A la previa en Puerto Norte, ese mismo 24 de junio del 2023, Tata no estaba convencida de ir. “Pensaba, no conozco a nadie, que voy a hacer ahí”, rememoró. Decidió por anotarse: “La pasamos espectacular”.
“Era como juntarnos a comer un asado con amigos y después te vas a jugar un fulbito”, contó y de inmediato recordó: “Nunca fui consciente de a quienes tenía al lado, de con quien estaba. Estuve muy relajada, lo pude disfrutar: entré a jugar y no estaba nerviosa, me reí mucho”, contó.
Lo que viene
“Hay mucha incertidumbre, es un torneo nuevo, una categoría distinta, mucho recambio en el grupo”, dijo Vives sobre lo que se le viene a la Lepra.
Este año jugará por primera vez en la máxima categoría del fútbol femenino argentino, tras vencer en la final a Talleres 2-0 y quedarse con el segundo cupo del ascenso, luego de que el primero lo consiguiera San Luis FC). El inicio del torneo aún no tiene confirmación oficial, pero se estima que será el fin de semana del 10 de marzo.
“Una quisiera que estén todas las jugadoras que lo lograron y que puedan vivir esto, que es de todas. Pero bueno, ahora estoy tratando de disfrutar y estar lo más tranquila posible, aprender de las que vinieron y tienen experiencia en Primera. Se está formando un grupo muy lindo, son muchas las que se sumaron. Es volver a armar un nuevo grupo y el juego, hay que conocernos, adaptarnos. Va a llevar un tiempo, pero con la práctica eso se va mejorando”.
Ahora, en plena pretemporada, Tata y el plantel rojinegro aprovechan para ver los partidos, ir conociendo los planteles y las jugadoras con las que se van a enfrentar en la Primera División.