Jonatan Garraza, quien estuvo tres meses prófugo y este martes fue imputado por ser el mejor aliado del capo del noroeste hasta el punto de apadrinar a su hijo. La Fiscalía ventiló el rol fundamental que cumplía el uniformado en la banda que no sólo se basó en la custodia sino también en brindar logística para llevar adelante un polirrubro de delitos
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