Search

Un solo orador en acto a 18 años del atentado a Amia

No habrá familiares para despolitizar la recordación de las 85 víctimas del ataque terrorista. Sólo hablará el titular de la entidad, Guillermo Borger. No estarán presentes ni la presidente Cristina de Kirchner, ni el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.

Sin la presencia de familiares en el palco, sin figuras invitadas, sin Cristina de Kirchner entre el público (viaja a Bolivia) y con su presidente Guillermo Borger como único orador, la AMIA recordará el 18° aniversario del atentado que destruyó su sede en Pasteur 655 y provocó 85 muertos. La recordación tendrá esta vez un fuerte contenido comunitario, y perderá el tono partidista que le impusieran algunos representantes de las víctimas.

Lo que motivó este cambio fue justamente el discurso que leyó el año pasado Sergio Burstein, miembro de la agrupación «Familiares y Amigos de las Víctimas de la AMIA». Allí este militante, que no disimula su cercanía con el Gobierno, atacó con dureza al jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri (con quien mantiene un contencioso por la causa de las escuchas) y al periodista José Eliaschev (por haber denunciado un supuesto contubernio con el Gobierno de Irán, país acusado por la Justicia de haber organizado el atentado de julio de 1994).

Sin embargo, lo que decidió a la dirigencia a excluir del acto a Burstein y al pequeño grupo que lo sigue (no son más de cuatro familias) fue el hecho de haberle atribuido al rabino y legislador porteño por el PRO Sergio Bergman la «política del miente, miente que algo quedará».

La frase es de Joseph Goebbels, el ideólogo del aparato de propaganda nazi durante el régimen de Adolfo Hitler; la comparación de un rabino con un jerarca nazi fue un límite que traspasó Burstein y que -a los sensibles ojos de la comunidad- lo dejó sin vuelta atrás.

Minutos después del discurso de Burstein -interrumpido varias veces por los silbidos de los asistentes-, Bergman se reunió con la dirigencia de la AMIA y exigió una reparación. Los directivos le aseguraron que ése había sido el último discurso deBurstein; cumplieron.

No fue sencillo: con Borger a la cabeza, los dirigentes de la AMIA intentaron recuperar a familiares de víctimas que se habían alejado de los actos por causas diversas (disconformidad con el protagonismo de Burstein, Olga Degtiar y Daniel Komarovsky; hartazgo de que la causa no avance ni un milímetro; el propio paso del tiempo) y habían conseguido que una de ellas aceptara hablar en nombre de ese sector. Sin embargo, a pocos días del acto, esa familiar se bajó del palco sin que trascendieran las razones de su decisión.

Reflejos

Los miembros del grupo «Familiares y Amigos…» fueron recibidos por la Presidente la semana pasada, quien les prometió una parte del predio de la ex ESMA para levantar allí un memorial. Los dirigentes comunitarios recibieron con sorpresa y en algunos casos desagrado la decisión oficial.

Rápidos de reflejos, los legisladores porteños por el kirchnerismo organizaron casi a la misma hora del acto central un «homenaje a las víctimas» en el Salón Presidente Perón del ex Concejo Deliberante. Allí el orador será Burstein, que seguramente aprovechará la ocasión para volver a atacar a Macri, la AMIA y a Bergman, entre otros.

Recuerdo

Como contrapartida, ayer la DAIA (representación política de la comunidad judía) puso la piedra fundamental del monumento que recordará a las víctimas del atentado en la Plaza Rubén Darío (Figueroa Alcorta y Austria) con profusa presencia de funcionarios del Gobierno porteño, que cedió el espacio físico para la obra.

El acto central, como todos los años, comenzará a las 8.53 con el sonido de una sirena; después se leerá la lista de las 85 víctimas y posteriormente hablará Borger.

También se escucharán frases leídas por 18 jóvenes sobre el dolor por el atentado, una por cada año desde que ocurrió. Se espera que el dirigente vuelva a reclamar por el casi nulo avance de la investigación y por las relaciones del Gobierno nacional con Irán. Esta vez la presencia oficial estará reducida, pese a que la Presidente -en su encuentro con la AMIA del lunes a la noche- prometió que buena parte de su gabinete concurrirá.

10