La Asociación Civil «Equística Defensa del Medio Ambiente» realizó una presentación ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación donde reclamó al Estado, en sus tres estamentos, la recomposición o reparación integral del Humedal del Delta del río Paraná afectado por las quemas sistemáticas que sufrió durante los últimos años.
La presentación está dirigida al Estado Nacional, las provincias de Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires y las municipalidades de Rosario y Victoria. La asociación civil recurrió a la Corte Nacional al entender que debe intervenir atento a la contaminación ambiental producida y la afección interjurisdiccional.
Explicaron que, desde hace varios años, hay una quema indiscriminada en el Humedal, principalmente en el cordón de islas que están frente a la costa Rosario y que se extiende más allá de San Nicolás.
Ello implicó que la organización presente un amparo ambiental. En dicho trámite la Corte dispuso, en agosto del 2020, la creación de un comité para prevenir, controlar y hacer cesar incendios irregulares en la región del Delta del Paraná. A pesar de ello las quemas no se controlaron ni cesaron sino que se multiplicaron.
La demanda explica que si bien todos los demandados reconocen los daños ocasionados a la salud, ambiente y visibilidad y las consecuencias del humo, deslindan responsabilidades echándose la culpa unos a otros . Explicaron que el daño ambiental es incalculable.
Según un informe de la secretaría de Medio Ambiente que se cita en la demanda, desde junio hasta agosto del 2020 se profundizó una alta recurrencia de incendios de pastizales en el Delta del Paraná. Según el informe adjunto emitido por la Administración de Parques Nacionales, es probable que los eventos de fuego descontrolados tengan un origen intencional en el marco del manejo de pasturas naturales para la actividad de ganadería extensiva que al no contar con barreras hídricas naturales se propagaron extensivamente, explica el documento.
También anexaron un informe hecho por Conicet y UNR en agosto de 2022 donde refiere que: la sequía del año 2019 que se extendió a los años siguientes, el nivel más bajo del río y el uso del fuego para eliminar los pastos nativos, provocaron cifras récord de incendios en el Delta en ese periodo. La frecuencia de estos eventos de quema de biomasa y falta de precipitación en la región han intensificado su impacto en el humedal en los últimos años, explica.
La asociación dijo que la gravedad del tema no permite que el Estado delegue sus responsabilidades y agregaron que si bien todas las autoridades expresan su preocupación desde que se dictó la medida cautelar no se soluciona nada y el daño se profundizó.
El deterioro casi total de la zona en sí, no sólo la flora y fauna, sino el funcionamiento del sistema que conforma el humedal es indescriptible, aseguraron. Pidieron la remediación o reparación ambiental y neutralizar las nuevas quemas para proteger a las personas, flora y fauna de modo efectivo.
