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Una enigmática conexión entre un psicólogo en duelo y un extraño niño

Protagonizada por el comediante Billy Cristal, “Before” se propone como un thriller con situaciones que bordean lo sobrenatural, con fantasmas y posesiones incluidas, donde las culpas van tendiendo una trampa sin salida aparente

Gustavo Galuppo / Especial para El Ciudadano

Before, de Apple TV+, parece retomar la fórmula que la cadena Hulu utilizó en 2022 con su serie The Patient, un thriller con capítulos de media hora (duración convencional de las comedias) protagonizado por un actor asociado, justamente, al género de la comedia. En aquel caso se trataba de Steve Carrel, en este de Billy Cristal, recordado por sus trabajos en películas como Cuando Harry conoció a Sally o Analízame. Si The Patient alcanzaba una cierta intensidad, entre la tensión y los toques de humor negro, Before, por su parte, se empantana un poco apelando a la repetición de lugares comunes ligados al terror psicológico y a la sombra de lo sobrenatural. Billy Cristal, sin embargo y cuanto menos, sale bien parado al trabajar este aspecto poco frecuente en su carrera.

Before intenta trabajar un aspecto dramático ligado al duelo con un hecho en apariencia accidental que adquiere ribetes sobrenaturales o alucinatorios. Eli (Billy Cristal) es un psicólogo que acaba de perder a su esposa en un trágico acontecimiento. Incapaz de procesar la pérdida, y habiendo aun ciertos puntos oscuros que refieren a esa muerte, hace aparición en su vida un niño con trastornos emocionales que comienza a revelar una posible conexión con su pasado.

Tal conexión, enigmática, se manifiesta poco a poco en situaciones que bordean lo sobrenatural, jugando dificultosamente el relato, y un poco rutinariamente, con esquemas de lo fantasmal y la posesión. Pero todo siempre mantenido en el velo de la duda. El mundo de Eli se ha desmoronado y tal vez sus posibles culpas lo estén entrampando en una pesadilla por él mismo elaborada.

El niño en cuestión irrumpe en su casa una noche de improviso. En principio, nada parece significativo, tan sólo un niño extraviado y confundido. Pero todo tomará otro carril cuando, poco después, Eli es convocado para tratar a una paciente conflictivo, el último caso antes de retirarse. Es claro que se trata de Noah, el niño que ha irrumpido en su vida y que parece estar ligado a la muerte de su pareja o cuanto menos a algún hecho de su pasado. A partir de allí, lo cual es casi de inmediato, el relato avanza de forma un tanto rudimentaria, acumulando encuentros entre Eli y Noah, en los que hechos inexplicables van destejiendo la trama oculta de un pasado enigmático.

Eli no logra procesar la muerte de su pareja, incluso ella se le aparece de modo constante evidenciando la fragilidad de su aparente cordura. Noah, por su parte, hablará en lenguas extrañas, tendrá visiones escabrosas que lo llevan a ejecutar actos violentos, hará extraños dibujos que conectan con la mujer muerta, y esbozará a medias secretos misteriosos y acusatorios que ponen a Eli en la mira. Poco a poco, el psicólogo se irá sumergiendo en una realidad alucinatoria y pesadillesca en la que se torna imposible discernir lo real de lo irreal.

Si bien Billy Cristal lleva adelante con solvencia su personaje, aportando este aspecto suyo pocas veces visto, y el niño, sin escapar a ciertos estereotipos, también aporta un toque algo tenebroso, el relato se estanca rápidamente en lo obvio y en la repetición de fórmulas desgastadas y ya un poco irritantes.

 

Por momentos el misterio que se va desplegando puede generar algo de interés y expectativa, pero en general, y este es el problema principal,  se asiste a una especie de pastiche en el que cada elemento no es sino, y de modo evidente, un recurso adocenado, muchas veces visto, y todo se convierte en una suerte de acumulación cansina de situaciones ya vistas hasta el hartazgo.

¿Falla Before entonces y complemente como thriller de corte sobrenatural? Se puede decir que no, pero también que nada alcanza, que todo huele a poco y gastado. Hay algo de pereza en todo esto, una apuesta a la reiteración de recursos conocidos, como si con eso ya fuera suficiente para sostener un relato y “entretener”.

Y parecería también que la decisión de la duración de media hora por episodio se vincula con eso mismo, con esa perspectiva tan instalada: son sólo cápsulas breves y de fácil digestión que alcanzan apenas para sostener la atención por un rato y sin que nada importe, ni la profundidad dramática, ni la coherencia narrativa, ni mucho menos, claro, la inquietud formal. Sólo se trata de llenar un breve lapso de tiempo y pasar a otra cosa, y en eso Before es efectiva.

Pero cae de maduro que no es esto un mérito de la serie, sino un serio problema que las plataformas no dejan de instalar y naturalizar con una producción ya alarmante en su medianía (y esto, claro, con felices excepciones, acaba de terminar una serie magistral, El Pingüino, un punto altísimo de HBO que devuelve a las series a sus mejores momentos).

Before / Apple tv + / 1 temporada

Creadora: Sarah Thorp

Intérpretes:  Billy Cristal, Tony Judith Light, Jacobi Jupe, Rosie Perez y Tony Maria Dizzia

 

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