La firma suiza Glencore ofreció a Vicentin 325 millones de dólares por el tercio de las acciones que aún mantiene sobre Renova. Se trata de una empresa que crearon a medias, pero que está a un paso de quedar en manos extranjeras. Representa nada más y nada menos que una de las principales moliendas de granos del mundo con fábricas de harina y aceite de soja en la provincia de Santa Fe.
Para Vicentin, aceptar esta propuesta le daría un poco de oxígeno teniendo en cuenta la situación financiera que atraviesa desde que se declaró en «estrés financiero» a fines del año 2019. Pero, por otra parte, el trato significaría que la empresa local se desprenda de unos de sus patrimonios más importantes y deje de ser la mayor exportadora de aceite de soja de Argentina.
La oferta que trascendió a través de la agencia de noticias Reuters, llega en medio de las dificultades financieras que atraviesa la empresa de las familias Padoán y Nardelli. Las plantas llevan tres meses de inactividad luego de haber declarado el Concurso Preventivo de Crisis en el mes de febrero donde oficializaron deudas por 1.500 millones de dólares. A esto se suma la compleja realidad económica mundial producto del avance del coronavirus.
A partir de esta situación, la firma Glencore, buscará quedarse con la totalidad de una empresa que fundaron a medias en el año 2007. Renova cuenta con una capacidad de molienda de 20.000 toneladas de granos diarios, posee una fábrica de biodiésel en San Lorenzo y de aceite y harina de soja en Timbués.
Poco antes de que Vicentin asumiera el default, ambas multinacionales controlaban a medias el funcionamiento de Renova, pero durante diciembre, los suizos pasaron a controlar el 33% de la producción dejando a la firma de Padoán y Nardelli con apenas un tercio del paquete accionario.
De concretarse la operación, puede significar algo más que un pase de manos, ya que lo que está en disputa, más allá de la comprometida situación financiera de la productora local, es el control sobre uno de los mayores generadores de divisas del país.
Mientras tanto el Concurso Preventivo de Crisis de Vicentin sigue adelante en el Juzgado de Primera Instancia Distrito 4 en lo Civil y Comercial, Segunda Nominación de Reconquista. La empresa acumula una deuda de 1.350 millones de dólares, 1.000 millones corresponden a los bancos y el resto a empresas del sector agrícola.
Dentro de ese monto se encuentra la deuda de 18.500 millones de pesos contraído con el Banco Nación durante la administración del macrista Javier González Fraga. Hasta el momento, y en medio de la crisis producto del avance de la pandemia de coronavirus, no hubo avances significativos en la negociación.
Cómo sigue Vicentin tras la apertura del Concurso Preventivo de Crisis
