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Una jornada masiva, con mucho color y varias manifestaciones

Según el gobierno provincial, más de 200 mil personas participaron de los festejos. Hubo un amplio “desfile cívico”. El evento también contó con música en vivo y un concurso con 87 asadores a la estaca

Los colores celeste y blanco tiñeron el Monumento al celebrarse el Día de la Bandera, que tuvo un acto formal que duró muy pocos minutos. El protagonismo mayor se lo llevó este año el desfile cívico, que fue encabezado por los ex combatientes de Malvinas en avenida Belgrano. Según el gobierno provincial, hubo más de 200 asistentes. Pese al  faltazo del presidente Mauricio Macri, distintas organizaciones protestaron igual contra sus políticas económicas.

La ausencia del mandatario nacional marcó un quiebre en los festejos. Es que la noche del martes se quitaron todas las vallas y así desde la mañana todo estuvo abierto al público.

La jornada se inició con el discurso de la intendenta Mónica Fein, quien eligió reivindicar la figura de Manuel Belgrano. Tras eso cadetes y soldados realizaron la tradicional jura de la bandera, y el acto formal terminó.

Algunas manifestaciones

Más allá del motivo central del evento, el día estuvo cargado con diferentes movilizaciones. Antes de que comience el desfile cívico, manifestantes Provida marcharon para hacer oír el rechazo al proyecto que aprobó la Cámara de Diputados para legalizar la interrupción del embarazo.

También estuvieron presentes organizaciones que levantan su voz contra el maltrato animal. Uno de los ejes denunciados por las proteccionistas fue la tracción a sangre: una de las defensoras aseguró que en la ciudad se incrementó el cirujeo y pidió por la libertad de los caballos.

La llamada Multisectorial contra los Tarifazos también estuvo en el Monumento a la Bandera. Los manifestantes llevaron carteles que rezaban “No a la Reforma Laboral”, “Basta de Tarifazos”, “No al FMI”, “1976 con las botas. 2015 con los votos. 2018 con el veto”.

Otro grupo que se hizo escuchar fue el de los inmigrantes senegaleses que habitan en la ciudad. Lo curioso es que, en este caso, el motivo de la movida fue totalmente diferente.

Se metieron en los festejos solo para mostrar satisfacción con el desempeño de su seleccionado en el Mundial de fútbol de Rusia. El equipo africano venció el martes 2 a 1 a Polonia en su debut en el Grupo H. El entusiasmo de esa comunidad fue tal que algunos hasta se animaron a pronosticar que la final de la competencia mayor del deporte será entre la Argentina y Senegal.

Los vendedores

En tanto, otro de los clásicos de la jornada volvieron a ser los vendedores ambulantes: ofrecían desde chipá hasta semillitas de girasol, torta asada, churros, pirulines, pastelitos, praliné y pan de chicharrón.

También aprovecharon la ocasión para vender las típicas banderas argentinas. Hubo de las chicas, medianas y grandes, y hasta una réplica de la copa del mundo que oficiaba de alcancía. Todo a precios populares.

Del otro lado del Parque se ubicaron los puesteros de las Ferias de Economía Social ofreciendo artesanías, mates, carteras, bijouterie, mesas, sillitas con dibujos infantiles, plantas, palo santo, inciensos y canastos, entre otros productos.

Mientras que en los carros de comidas se vendían porciones de costillar a 250 pesos; sándwich de vacío a 100; costillitas de cerdo a 150; la docena de empanadas a 180, el chori a 50; el cono de papas a 50; la torta asada a 30; gaseosas a 50 y la porción de locro a 100 pesos. Pasando las 11.30 a muchos ya les comenzó a hacer ruido la panza y se fueron acercando de a poco a los puestos para encargar el almuerzo.

El gran desfile

El epicentro de los festejos de este año fue el tradicional desfile civil dónde dejaron su huella asociaciones vecinales, clubes de barrio, Bomberos, espacios culturales, grupos folclóricos y representantes de pueblos originarios de la comunidad Mocoví, Coya y Qom, entre muchos otros participantes. A ninguno le faltó su sonrisa en la cara.

En ese marco, uno de los grupos más aplaudidos fue el que sostuvo la bandera más larga del mundo, del Proyecto Alta en el Cielo.

Foto: Juan José García

Tampoco faltó la música de Los Palmeras. Es que, mientras los presentes circulaban por avenida Belgrano, la orquesta tocó la melodía La Suavecita, un hit del grupo cumbiero santafesino.

Asadores a la Estaca

Finalmente, el color lo entregó el tradicional concurso de “Asado a la Estaca”. Desde muy temprano llegaron los 86 participantes, quienes se prepararon para hacer el mejor asado.

El grupo evaluador estuvo integrado por Marcelo Megna, Damián de Lorenzi y Leo Ponce, tres conocidos chefs de la ciudad.

El primer premio se lo llevó el asador que participó con el nombre “La Estaca no se mancha”, el segundo fue para  “Más asado que hockey” y el tercero “Raza Fuerte”, todos de Rosario.

A favor de los festejos jugó el hecho de que el día acompañó, salió el sol bien temprano y hasta se pasó por alto que este jueves ya comienza el invierno. Este año, en el homenaje del 198° aniversario de la muerte de Manuel Belgrano, el pueblo fue el protagonista.

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