La destacada compañía de teatro local Kashimà sumará desde este domingo un nuevo estreno a su vasta producción. Se trata de El País del Ignorimio, propuesta que acerca un viaje lúdico y al mismo tiempo crítico en relación con un tiempo donde la educación y la escuela, al menos en sus formas tradicionales y aceptadas, parecen estar en peligro. Para eso, en este viaje que emprende Sofía, la protagonista de esta historia que se enfrentará a un gran acertijo, el grupo se vale de recursos estéticos que, desde la geometría, acercan a las y los espectadores los imaginarios de grandes referentes del arte universal como Miró, Kandinsky, Mondrian o Dalí.
El País del Ignorimio, que al mismo tiempo es una reversión de un trabajo anterior llamado Deformas, y donde regresan personajes de otros montajes e historias de este colectivo de trabajo artístico, cuenta con texto y dirección de Agustina Toia, diseño de luces de Severo Callaci, las actuaciones de Julia Rovere, María Victoria Franchi y Valeria Rico; objetos y escenografía de Guillermo Haddad, producción y asistencia de dirección de Laura Wulfson, arte gráfico de Adriano Di Mauro, técnica de sonido y luces de Camila Viale y vestuario de Sara Toia y Silvina La Calamita, con producción general de la compañía Kashimà.
Respecto del material, desde Kashimà, y a modo de presentación, adelantan: “Sofía ha deseado algo, esto se ha hecho realidad. ¿Será posible volver hacia atrás? A través de un viaje por el País del Ignorimio, ingresamos a un mundo donde la escuela ha desaparecido y las formas han perdido su molde. Te invitamos a ser parte de esta aventura junto a Sofía para desvelar el acertijo que la ayudará a regresar a su lugar. Un juego entre realidad y ficción, el arte, la geometría y las palabras”.
“En esta propuesta regresa uno de nuestros personajes iniciáticos de Leer para creer, ése es uno de los datos más lindos de este material, porque se trata de un personaje que plasma el mundo mágico de los niños; es una especie de «ángel de los niños» que siempre está atento a sus necesidades y deseos”, contó a El Ciudadano la actriz, directora y dramaturga local Agustina Toia.
Y sumó: “Del mismo modo que en Leer para creer este personaje le deja a Malena, su protagonista, este libro mágico a partir del cual cobran vida todos sus cuentos y hace que, de algún modo, esta niña deje de lado su tablet y se conecte nuevamente con la experiencia lúdica, con las historias y las aventuras que empieza a vivir, ahora, este regreso del personaje mágico sirve para plasmar un nuevo mundo que es El País del Ignorimio, que en cierta forma plantea un modo poético de referirse al «país de la ignorancia», que es un lugar donde la escuela desapareció. Y este mundo también se plasma a partir del deseo de Sofía, una niña que no quiere ir nunca más a la escuela, aunque quizás se arrepienta de esa decisión».
Respecto de lo que material encierra como fábula, la destacada actriz y directora reflexionó: “Es una obra que plasma todo el mundo de la escuela, la importancia que tienen los vínculos que en su recorrido se establecen tanto con las maestras como con el resto de los alumnos, entre otras personas; pero sobre todo habla de la importancia del saber y del conocimiento. Es una obra donde aparecen los juegos de palabras para acercarnos al mensaje, también la multiplicidad de personajes que es un clásico del trabajo del grupo, como por ejemplo la irrupción del Vendedor de Palabras, la directora que es la Reina de la Geometría, Juancho El Kioskero que ofrece cosas un poco extrañas; Serafina La Portera y el Mensajero del País del Ignorimio”.
Y finalmente sumó: “En ese campo, apelamos a la riqueza de los juegos teatrales dado que son tres actrices que, al mismo tiempo, llevan adelante varios personajes cada una, jugando con la idea de la transformación y la multiplicidad de voces. Es un montaje donde buscamos mostrar cierto corrimiento de los lugares tradicionales de la educación y el paso por la escuela, donde hay un desfasaje en los roles de cada uno de los personajes involucrados, porque este País del Ignorimio está todo despatarrado, revuelto”.
El grupo Kashimà es una compañía artística que produce teatro y cine en Rosario. En 2014 estrenó su primera obra de teatro para todo público, la referida Leer para creer, vinculada al mundo de la literatura, que luego tuvo su adaptación al cine a partir de Leer para creer, la película que se conoció en 2017, del mismo modo que a su formato literario con la publicación de este año de Malena-Leer para creer.
A su tiempo, en 2016, el grupo presentó una nueva producción teatral para todo público. Se trató de Deformas, relacionada al mundo de la geometría y el arte visual, mientras que en 2018 puso en escena la tercera, La fábrica de sonidos.
Por otra parte, en 2017, Kashimà rodó el largometraje Fragmento, mientras que a lo largo de todos esto años el grupo recorrió gran parte del país con sus producciones, con funciones realizadas en salas de teatro, centros culturales, escuelas, bibliotecas, ferias del libro, festivales, parques, centros de distritos, pueblos y ciudades.
Para agendar
El País del Ignorimio se conocerá este domingo, a partir de las 16, en el Cultural de Abajo (Entre Ríos 579), donde seguirá en cartel los restantes domingos del mes. Las entradas anticipadas, a 500 pesos, se pueden reservar a través de http://www.pedidosporwhatsapp.com.ar/Kashima
