Tras dos allanamientos –uno en Rosario y otro en Arroyo Seco–, personal policial especializado en trata de personas de Santa Fe detuvo este miércoles a dos mujeres. Las investigaciones que desembocaron en los operativos apuntan a una de ellas como responsable de un burdel rosarino.
Los allanamientos y detenciones estuvieron a cargo de la Agencia de Investigación sobre Trata de Personas y Violencia de Género de la Policía de Investigaciones. La investigación comenzó en junio pasado a partir de una denuncia telefónica anónima.
El Ministerio de Seguridad provincial informó que los operativos se llevaron a cabo en forma simultánea en las dos ciudades alrededor de las 23 de este miércoles. Uno fue en una vivienda de Suipacha al 2000 de Rosario. El otro, en Playa Hermosa y Necochea, de Arroyo Seco.
Jorgelina Aguirre, jefa provincial de la Agencia de Trata, explicó que en los procedimientos se detuvo a Bárbara G., señalada como responsable de un lugar dedicado a la promoción, facilitamiento y explotación de la prostitución ajena.
La madre de la imputada quedó demorada en la causa por tenencia Ilegal de arma de fuego de uso civil.
La fuerza de seguridad encontró en los domicilios allanados una escopeta de caño yuxtapuesto calibre 12mm, lencería erótica, elementos erotizantes, profilácticos en gran cantidad, folletería con ofrecimientos sexuales. Secuestró además un Peugeot 207, cinco teléfonos celulares, seis dispositivos de almacenamiento, dos computadoras y gran cantidad de documentación.
Las mujeres fueron puestas a disposición del juez de 1ª instancia Gonzalo López Quintana de la fiscal de Flagrancia Andrea Vega.
Sobre la investigación
Según dijeron voceros del Ministerio de Seguridad, la investigación se inició en junio del 2018 por un llamado a la Línea 145 del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento de Víctimas de Trata de Personas, en la que se daba cuenta de la existencia de un departamento privado en Suipacha al 2000 de Rosario, una de las direcciones allanadas.
“Tomando cartas en el asunto la dependencia provincial interviniendo en todo momento la fiscal Noelia Riccardi, de la Unidad Fiscal Especializada en Delitos contra la Integridad Sexual de la ciudad de Rosario”, explicaron las pesquisas.