María Celeste Craia, reciente graduada de la Facultad De Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas (FBIOyF) de la UNR, ganó el primer Premio “Doctor Pedro Ramón Figueroa Casas”, en el XIX Congreso Argentino de Medicina Reproductiva por el trabajo de investigación “Efectos de la Cirugía Bariátrica sobre el perfil hormonal testicular y la calidad seminal” en pacientes obesos de Rosario.
Este proyecto, la consagró a Craia en uno de los ámbitos científicos más exigentes de la medicina reproductiva de nuestro país, y además, le permitió obtener con calificación sobresaliente, el título de grado de Licenciatura en Biotecnología de la FBIOyF.
“Es todo un honor haber ganado el primer premio “Doctor Pedro Ramón Figueroa Casas”, ya que lleva el nombre de un reconocido ginecólogo rosarino, pionero en la medicina reproductiva, padre de la fecundación in vitro”, dijo María Celeste, en referencia al reconocimiento logrado.
El estudio contempló a un grupo de pacientes (varones jóvenes) obesos mórbidos menores de 45 años, los cuales fueron evaluados en cuanto a sus características seminales y perfil reproductivo antes y después de 6 a 10 meses, de someterse a una cirugía bariátrica para el descenso abrupto de peso.
El análisis espermático, se hizo según las normas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), analizando entre otras variables, concentración, movilidad, morfología y núcleo de los espermatozoides, las cuales tienen un impacto en la capacidad fecundante del espermatozoide humano.
Sobre los resultados de los estudios, Craia describió que “hubo una disminución en la calidad seminal en los pacientes asociada a la disminución de la concentración total de espermatozoides, a la vez que se registró una disminución de algunas variables cinéticas relacionadas en la movilidad.
«Probablemente debido a la deficiencia en macro y micronutrientes que genera la cirugía, también observamos una menor tendencia al daño en el ADN espermático luego de intervención quirúrgica”, explicó la flamante Licenciada en Biotecnología.
En cuanto a la concentración hormonal, que se analiza a través de una muestra del suero humano, los resultados determinaron que “hubo una mejora en la concentración hormonal FSH, y en la globulina transportadora de hormonas sexuales SHBG, que puede estar relacionado con la mejora metabólica del paciente luego de la cirugía”, aclaró la joven.
Este proyecto, mostró resultados innovadores sobre cómo afectan las intervenciones quirúrgicas para disminuir el peso corporal en la salud reproductiva de los varones jóvenes con obesidad mórbida. También permitió poder generar a partir de los médicos una concientización sobre posibles efectos a nivel reproductivo y la necesidad de consejería apropiada.
Por su parte, el doctor Andrés Sciara, decano de la facultad de Bioquímica, expresó que «la investigación en medicina reproductiva tiene una larga trayectoria en nuestra casa de estudios con varios grupos de investigación de excelencia. Este premio consolida ese camino que venimos recorriendo, y sin dudas, impulsa a seguir trabajando en más y mejor desarrollo científico en la temática. Felicito a María Celeste y todo su grupo por este logro».
El financiamiento del proyecto se hizo a través de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), a partir del Programa Vinculación Tecnológica y Desarrollo Productivo.
El desarrollo de la investigación involucró a distintos espacios físicos y de atención de la salud: Laboratorio de Medicina Reproductiva de la FBIOyF, Laboratorio de Endocrinología del Hospital Centenario, cátedra de Biología de la Facultad de Ciencias Médicas y la Unidad de Cirugía Bariátrica y Metabólica del Sanatorio Británico de Rosario.
Desarrollo del proyecto
La vinculación y la articulación entre los distintos equipos, demandaron dos años de trabajo intenso signado por la pandemia del coronavirus con gran soporte logístico. “Comenzamos llamando por teléfono a los pacientes que consultaban para hacerse la cirugía bariátrica, donde le contábamos el proyecto y se los invitaba a participar y acordábamos una entrevista», contó Craia.
Y siguió: «Con la aprobación de los respectivos Comités de Bioética y el consentimiento del paciente, coordinamos una cita donde se recogieron, tanto la muestra seminal como el suero”.
“Estos análisis se repitieron seis meses después de la cirugía sobre una muestra de nueve personas. Pero en el medio nos sorprendió la pandemia y nos encontramos con pacientes con fiebre, por lo que hubo que retrasar la muestra para asegurar ciertos parámetros de confiabilidad”, destacó la graduada en Biotecnología.
El estudio finalizó con la confección de estadística y la redacción final: “Toda mi tesina fue escrita en pandemia, la empecé en marzo y la defendí en diciembre. Fue todo virtual y un momento muy difícil. Escribir este proyecto me sirvió para tener la cabeza ocupada durante esos meses que estuve sin ver a mi familia”, dijo Craia, y agradeció especialmente al Laboratorio de Medicina Reproductiva y al área de Bioquímica Clínica, por la dirección del proyecto.
Tres meses después, la graduada en Biotecnología recibió una noticia inesperada: “Cerrar esta etapa con un premio es increíble, es un motivo para decirle a los alumnos que generalmente atravesamos bajones en esta facultad que no hay que dejar de soñar ni bajar los brazos, que todo está allí esperándonos”.