El abogado de los rugbiers franceses Oscar Jégou (20) y Hugo Auradou (21), imputados por abuso sexual de una mujer de 39 años en Mendoza, insistió en la inocencia de sus defendidos y volvió a cargar tintas sobre la denunciante: “Una señora de 40 sabe lo que hace”, dijo Rafael Cúneo Libarona, hermano del ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona.
Según publicó el portal Sitio Andino, el letrado habló con la prensa para dar más detalles sobre lo que ocurrió entre los jugadores y la presunta víctima. «Son inocentes, desconocen absolutamente los golpes. Están conmovidos”, sostuvo este jueves, horas antes de que los deportistas galos arribaran a la capital de la provincia cuyana desde Buenos Aires, en un traslado policial. Este viernes comparecieron en el Polo Judicial local: ambos se abstuvieron de declarar y fueron imputados por abuso sexual con acceso carnal, agravado por la participación de dos personas.
El abogado contó que los rugbiers conocieron a la víctima en un boliche de Maipú: “Hablan, bailan, empatizan y según la víctima, o la denunciante, o la acusadora, la invitan a ir al baño del boliche en tres oportunidades. La invita Auradou, y ella se niega, pero minutos después va al hotel, va a la habitación», relató.
“Ambos tomaron un Cabify para llegar al hotel de cinco estrellas ubicado en calle Belgrano junto a otra pareja, un francés y una argentina, que sería testigo del hecho”, continuó.
«Suben y el jugador francés se olvida la llave o la tarjeta o el QR y baja y ella se queda esperando en la habitación, es otro indicio de consentimiento de ir. Primer indicio, salida del boliche; segundo indicio tomar un Cabify; tercer indicio, subir; cuarto indicio, esperar al chico de 20 años, una señora de 40 que ya sabe lo que pasa en la vida», insistió Cúneo Libarona.
El abogado retomó más de una vez el cuestionamiento a la denunciante por la diferencia de edad con su presunto agresor: «Veinte años de diferencia son veinte años de diferencia. Pero no vamos a estigmatizar tampoco a la acusadora», señaló.
Pero volvió al punto: «Si yo tengo 40 años y voy a la habitación de un chico después de que me ofreció tres veces ir a un baño de un boliche a tener sexo, le dije que no; pero después voy al hotel, después voy a la habitación y aparentemente el chico, según los rumores, hacía maniobras obscenas en el hotel, en la recepción y subo a la habitación, lo espero a que agarre la llave, y entro en una habitación; ¿dónde está el principio del no? Él no es no en el boliche: no quiero ir al hotel, no quiero ir a un baño, no quiero ir a una habitación, no te voy a esperar, no te conozco y tenés 20 años menos que yo».
«Lo único que tenemos es una señora de 40 años que se va, se va a su casa y aparece un día y medio después y hace una denuncia de golpes y de violación», insistió el abogado.
En la rueda de prensa, Cúneo Libarona refirió que los padres de los detenidos estaban viajando hacia Mendoza –ya llegaron– donde tenían previsto alquilar una propiedad para ejercer la tutoría de los jóvenes rugbiers. “Cuando tenés tutor, tobillera con control policial permanente, no tenés pasaporte, no hablás castellano y toda la delegación se volvió a Francia… Estamos garantizando que no hay riesgo de fuga ni entorpecimiento de la investigación”, explicó Cúneo Libarona.
En tanto el gerente del local bailable en el que se conocieron la víctima y los jugadores, ubicado en Maipú, declinó hacer declaraciones a excepción de reafirmar que están colaborando con la Justicia. Los testigos, las cámaras y otras pruebas de lo que ocurrió el sábado pasado son claves para la investigación.
Durante las próximas semanas se espera que se realicen pericias físicas y psicológicas a la víctima, como así también a los acusados. Se tomará declaración a testigos, personal de seguridad del boliche y empleados del hotel donde ocurrieron los hechos.
La denuncia por abuso sexual se radicó el domingo pasado, un día después de que los rugbiers jugaran con la Selección de Francia ante Los Pumas en el Malvinas Argentinas.