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Una vez más Alan Funes señaló a Alexis y Juanchi

Es por el crimen de Mariela Miranda, asesinada en marzo de 2016. Alan fue testigo y volvió a sindicar a Alexis Caminos y a Juanchi Almada como los autores

Alan tiene 20 años recién cumplidos y Alexis 22. Se conocen desde chicos, vivieron en el mismo barrio y fueron a la misma escuela. Y están enfrentados a sangre y fuego. Alexis está imputado por el crimen de la madre de Alan –junto a Juanchi Almada–, ambos están presos y enfrentan varias causas que los investigadores adjudican a una guerra sin tregua entre Alexis, el hijo del Pimpi Caminos, quien supo comandar hasta su muerte la barra brava de Newell’s y la familia Funes. Este martes se volvieron a ver las caras en una audiencia oral y pública donde declaró Alan, testigo presencial del homicidio de su madre. Una vez más volvió a señalar a Alexis y Juanchi, pero la defensa del primero intentó introducir un video de un domo municipal donde se ve una motocicleta circulando por la calle. La abogada pretendió demostrar que las características físicas de las personas que iban sobre el rodado, quienes presuntamente perpetraron el crimen, no tienen correlato con la apariencia física de su cliente. La fiscal se opuso y la defensora no tuvo suerte, por lo que deberá esperar a la audiencia preliminar. Después intentó profundizar en el contra examen al testigo, pero no hizo más que reeditar preguntas por lo que el juez le llamó la atención. Alan volvió a señalar a su cliente como el conductor de la moto y a Juanchi como su acompañante que disparó aquel mediodía de marzo de 2016 cuando asesinaron a su madre.

En abril pasado la fiscal Marisol Fabbro, a cargo de la investigación del crimen de Mariela Miranda, madre de Alan, pidió que el muchacho –testigo ocular del hecho– declare anticipadamente al juicio. El pedido lo hizo en base al “peligro y riesgo que corren los Funes” ya que parte de su familia fue asesinada. En este año balearon a su padre y mataron a dos de sus hermanos.

En mayo Alan fue trasladado desde el penal donde está detenido para contar lo que vio el día que mataron a su madre. Fue a las 13.30 del 11 de marzo de 2016. Miranda estaba en la puerta de su casa charlando con su hijo Jonatan –asesinado en febrero de este año a la salida del penal de Piñero–, Alan y un vecino mientras Taiel, el más pequeño de las Funes, rondaba entre ellos. Alan estaba apoyado en el auto de su papá, parado sobre la vereda, y a la par de este vehículo –sobre la calle– había un colectivo estacionado.

En un momento apareció una moto Honda Tornado en contramano. “El de adelante era Alexis, con un casco sin visor y el de atrás era Juanchi, con un casco levantado”, acusó Alan. Contó que la moto venía fuerte pero antes del colectivo aminoró un poco y se escuchó la primera ráfaga de disparos; pasaron el colectivo y hubo una segunda y en la tercera le pegaron a Miranda, explicó en aquella oportunidad.

La audiencia pasó a un cuarto intermedio cuando el entonces defensor de Alexis pidió que se pase un video de un domo municipal donde se observa una motocicleta irse del lugar, pero no pudo mostrarse por cuestiones técnicas.

Este martes se reanudó la audiencia, aunque con una nueva defensa. Esta vez Alexis estuvo asesorado por Romina Bedetti y María del Carmen Varela. Las abogadas retomaron el reclamo del defensor anterior sobre la exhibición del video. Intentaron incorporarlo y demostrar, según expresaron, que los rasgos físicos de las personas que se ven en el video no coinciden con los de Alexis. Pero esta vez la fiscal se opuso, dijo que Alan no es un testigo idóneo para incorporar esa prueba y el juez no admitió el video. Dijo que pueden hacer el planteo en la audiencia preliminar con el testigo que corresponda.

Entonces Bedetti intentó profundizar en el testimonio de Alan, le preguntó nuevamente sobre quién llevó a su madre al hospital y sobre los agresores. La fiscal objetó y el juez le preguntó si había visto la grabación de la audiencia anterior. Bedetti dijo que sí intentó continuar con el interrogatorio y Alan dijo una vez más que vio a Alexis conduciendo con un casco negro que no tenía visor y Juanchi Almada en la parte de atrás de la moto con el casco apoyado en la frente. Aseguró que disminuyeron la marcha al tirar y por eso los vio. La defensora no hizo más preguntas.

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