El ministro de Trabajo y Seguridad Social de Santa fe, Julio Genesini, mantuvo un encuentro en la ciudad de Buenos aires con su par de Nación, Jorge Triaca. El cónclave tuvo como objetivo analizar la situación de la empresa multinacional Unilever, firma que decidió despedir a 65 trabajadores de su planta en Villa Gobernador Gálvez.
En la reunión, los funcionarios provinciales y los representantes sindicales expresaron su preocupación por el impacto y la incertidumbre que generó la desvinculación de 65 trabajadores, así como también la necesidad de conocer los futuros planes de inversión de la empresa, y señalaron que el principal objetivo es preservar las fuentes de trabajo, expresaron voceros de la cartera laboral provincial.
En tal sentido, se acordó convocar a la firma Unilever a una audiencia en el Ministerio de Trabajo de la Nación, de la cual también participen funcionarios de las áreas de Industria y Comercio para que la empresa presente un informe de situación con el detalle de las inversiones planificadas y sus proyecciones productivas y laborales.
El 23 de octubre, un día después de las elecciones que ratificaron el triunfo de Cambiemos, Unilever despidió a 65 trabajadores de su planta en Villa Gobernador Gálvez, pretextando “una inversión en tecnología”. La explicación no conformó a los delegados de los trabajadores y al sindicato de Jaboneros, que ven detrás de la decisión un intento de flexibilizar las condiciones de trabajo en la empresa, la que, por otro lado no presenta problemas económicos y productivos.
“Si sacan un tercio de trabajadores la empresa no puede ser operativa. El discurso que dieron tiene poco sustento en comparación con la realidad de la planta. Unilever quiere despedir por una cuestión política”, dijo a El Ciudadano, Andrés Quisana, delegado del Sindicato de Jaboneros, en ocasión de una audiencia en la sede de Trabajo rosarina, el pasado 21 de noviembre.
Unilever, por su parte, se justificó en la apertura de importaciones. Dijo que la entrada de jabones al país bajó dos líneas de producción en lo que va del año.
Por lo pronto, de los 65 trabajadores despedidos, una treintena eligió el camino de la indemnización; por el resto, desde el sindicato dijeron que continuarán peleando por sus puestos de trabajo. El próximo 7 de diciembre vence la conciliación obligatoria entre la empresa y los trabajadores.