Proyecto Miradas es una iniciativa de una pareja de jóvenes rosarina que desde hace dos años recorre Latinoamérica con una propuesta educativa dirigida a chicos de escuelas rurales. Ellos utilizan la astronomía como herramienta didáctica, pero el objetivo es tener un recurso para entrar al interior de cada persona y para hablar de su entorno y su comunidad. La iniciativa se transformó en documental, ya que un grupo de cineastas ganó un concurso de la red Al Jazeera y logró plasmar el trabajo de Proyecto Miradas en Chiapas.
Sofía Méndez es maestra jardinera y psicóloga social, y su pareja es Daniel Ekdesman, comunicador social e integrante del periódico El Eslabón. Tienen 32 años y son protagonistas del Proyecto Miradas. Si bien empezaron el viaje solos, al poco tiempo se les unió Negrita, su hija de seis meses que nació en Chiapas mientras filmaban el documental.
—¿Cómo surge el Proyecto Miradas?
—(Daniel) Venimos del trabajo social, incluso nos conocimos trabajando. Yo había viajado dos años por Latinoamérica y vine a Rosario a trabajar al barrio Toba y ahí nos conocimos.
—(Sofía) Trabajé siempre con chicos en una escuela muchos años, en grupos de apoyo escolar en barrios, en estimulación temprana en la cárcel.
—¿Qué surge primero, el viaje o el proyecto?
—(Daniel) Van de la mano, porque nunca concebimos viajar sin un proyecto social y cultural. Por un lado, no nos daba la espalda para un viaje turístico. Y cuando empezamos a focalizar el proyecto no queríamos caer en algo académico tipo tesis doctoral, ni en algo turístico. Y queríamos pensar cómo entrarle de alguna manera a las diferentes culturas que existen en Latinoamérica.
—(Sofía) Pero además esto es parte de otro gran proyecto que tenemos como proyecto de vida. Como familia, pareja. Un proyecto con una intención política y social. Nosotros nos queremos ir a vivir a un pueblo de Entre Ríos, Villa Paranacito, donde hay mucha gente con ganas de trabajar y de hacer cosas donde no hay muchas opciones para los chicos. Entonces el viaje es parte de la preparación para este futuro proyecto que es donde nos vamos a ir a vivir y a quedarnos por un tiempo. Queríamos recabar experiencias educativas para después aplicarlas en Villa Paranacito a la vuelta. Viendo qué funciona, qué se puede hacer. Y hacer una red de gente latinoamericana. Y pensando qué podíamos hacer, con qué población trabajar, fuimos recortando. Hasta que sintetizamos en escuelas rurales y públicas. Y conectándonos con comunidades.
— ¿Por qué la astronomía?
—(Daniel) Empezamos a focalizar en cómo trabajar las cuestiones culturales y en eso apareció la astronomía.
—(Sofía) Empezamos a pensar el abordaje, con qué instrumentos hacerlo. Porque nos preguntábamos sobre la importancia de poder motivar una expresión, un decir. Y buscamos un montón de instrumentos y recursos. En la práctica docente lo que se ve es la falta de atención sobre lo que miramos, cómo miramos.