Un total de 135 artículos de una ley considerada central para la administración del presidente conservador Luis Lacalle Pou serán puestos este domingo bajo la lupa ciudadana en Uruguay mediante un referendo con pronóstico de resultado ajustado. La consulta, además del futuro mismo de la norma, tendrá consecuencias para la administración nacional y la oposición encabezada por el Frente Amplio según sea el resultado.
Se trata de la llamada Ley de Urgente Consideración (LUC), que contiene 476 artículos y fue aprobada por el oficialismo en el Congreso el 8 de julio de 2020 en plazos muy cortos. Había ingresado con más de 500 artículos. Ahora se ponen en juego otros, medulares porque, entre otras cosas, afectan derechos en la educación, la seguridad, las protestas laborales, el futuro de las empresas públicas y las transacciones en efectivo, con el riesgo en este caso de facilitar el lavado de dinero.
La instancia del referendo fue un triunfo de un conjunto de organizaciones, entre ellas la central obrera PIT-CNT y el Frente Amplio. Se propusieron juntar más de 700.000 firmas para forzar la consulta y lo consiguieron en plena pandemia.
En los cuartos oscuros habrá boletas rosadas con el Sí a favor de derogar los artículos cuestionados y otras celestes con el No, que se expresan la voluntad de mantener la LUC como está.
Las últimas encuestas auguran un resultado muy apretado, con una leve ventaja para el Sí. El alto porcentaje de indecisos impide arriesgar un resultado con algún fundamento.
La Corte Electoral informó que hay 2.684.131 uruguayos habilitados para votar. Las mesas estarán abiertas de 8 a 19.30 hora local, que es la misma que en la Argentina.
Un triunfo del Sí significará un respaldo al Gobierno, y le dará aire político para avanzar con otras reformas legales en el mismo sentido, que afectan la estructura misma del Estado. En paralelo, y pese a que tanto oficialismo como oposición expresaron que no ven la consulta como una elección de medio término que plebiscita la gestión de Lacalle Pou, el resultado influirá sobre el margen de maniobra en adelante de su gestión.
Los cinco partidos que integran la alianza en el Gobierno pusieron a jugar en la campaña a sus principales dirigentes y el mismo lacalle Pou se involucró de lleno con el pasar de los días. De hecho, el cierre de la campaña por el No fue una conferencia de prensa del presidente.
Si gana el Sí (derogación de los artículos de la ley cuestionada), el Frente Amplio recobrará presencia política. Incluso, aunque el resultado sea por el No, saldrá fortalecido por haber conseguido forzar el referendo, lo que implicó demostrar una fuerte presencia territorial y capacidad de movilización aún en tiempos de pandemia. Una revitalización de sus estructuras de la mano, además, de un proceso de renovación de autoridades.
La campaña fue compleja, porque hubo que explicar el contenido de decenas de artículos de una ley extensa para argumentar las posiciones de unos y otros, aunque m´s las de la oposición. Así, además de los actos, la publicidad y las consignas, hubo una tarea hormiga cara a cara, de concientización en pequeños encuentros, de mucha presencia en medios y de charlas-debates en diversos ámbitos.
Una ley de «urgente consideración» que se las trae
La LUC fue sancionada por el Congreso con 476 de los 501 artículos con los que la ingresó el oficialismo.
Entre otras cuestiones, limita el derecho de huelga, declara ilegítimos a los piquetes en espacios públicos o privados que «afecten la libre circulación de personas, bienes o servicios», establece la figura de la «apariencia delictiva» y aumenta el límite de transacciones en efectivo hasta 100 mil dólares, lo que facilita el lavado de dinero y la evasión de impuestos.
Además, elimina la obligación de la educación inicial y recorta las funciones del Estado en el área, crea una modalidad de desalojo exprés de viviendas alquiladas y evita el modelo cooperativo de construcciones de casas, y habilita el cierre y/o la privatización de áreas estratégicas de la petrolera estatal Ancap.
Desde la restauración democrática, en 1985, apenas 13 proyectos de ley fueron enviados al Legislativo con esa declaratoria de urgente consideración: 9 fueron aprobados y 4 rechazados, pero solo 3 de esas iniciativas eran de la categoría «ley ómnibus».
Además del PIT-CNT y el Frente Amplio, la Comisión por el Sí reúne a la Federación de Estudiantes Universitarios Uruguayos (FEUU), la Intersocial Feminista, la Asociación de Asistentes Sociales del Uruguay (Adasu), las Intersociales de Salto, Carmelo, Rivera, Soriano, Artigas, Costa de Oro, Tacuarembó, Paysandú, Treinta y Tres y Fray Bentos; Madres y Familiares de Detenidos-Desaparecidos, y la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (Fucvam).