No es un acuerdo programático, porque “los equipos técnicos empezarán a debatir a partir del martes”. No es una alianza electoral, porque “el tiempo de las candidaturas vendrá más adelante”. Planteada como está, la confluencia de los concejales Diego Giuliano (Rosario Federal) y Laura Weskamp (PRO), el ex concejal obeidista Osvaldo Miatello, la pata peronista del PRO, Germán Mastrocola, y el demócrata progresista Agapito Blanco, parece ser un expectante espacio político que a partir del martes empezará a consensuar propuestas con el objetivo de terminar plasmándolas en una oferta electoral para la ciudad en 2011.
Tanto es así que a pesar del empeño demostrado para ponerle paños fríos a las probables candidaturas que podrían salir de ese espacio, ya acuñaron un eslogan: “Rosario está linda, hagámosla feliz”, donde se puede ver buena parte de la propuesta y del objetivo de la misma: “Nuestro diagnóstico es que el socialismo le ha dado cosas buenas a la ciudad, pero también es cierto que muestra signos de agotamiento, ha llegado a un límite y ya no tiene respuestas”, dijo Osvaldo Miatello ante la consulta de El Ciudadano sobre los alcances del flamante armado político.
Si bien los miembros de este nuevo espacio en conformación machacan en su discurso con que “el 70 por ciento de los rosarinos le dijo no al socialismo en la última elección”, es evidente que el discurso no pasa por salir a atacar sin concesiones a la gestión, sino a reconocerle sus puntos buenos y presentarse como la opción para completar lo que falta por resolver en la ciudad. “Lo que viene es una alternativa para la ciudad, que consolide lo que se hizo bien en estos años y construya lo que hace falta para que los rosarinos, además de vivir en una linda ciudad, sean plenamente felices. Por eso sintetizamos nuestro compromiso como «Rosario está linda, hagámosla feliz»”, dijo el concejal Giuliano, para luego completar: “Vamos hacia el post socialismo”.
En términos ideológicos la alianza es bastante previsible, aunque quizás lo más destacado en el terreno de lo impensado sea la presencia de un miembro del PDP, Agapito Blanco, candidato a concejal en las últimas elecciones, cuyo partido a nivel local y provincial integra la alianza del Frente Progresista (ver aparte).
“Tenemos una decisión política. Una orientación común que nos impulsa a trabajar juntos”, sintetizó Giuliano a pocos días de la presentación pública que harán este martes junto a Osvaldo Miatello, Germán Mastrocola, Laura Weskamp, Agapito Blanco y otros referentes de un espacio político transpartidario.
Según el concejal del peronismo Federal, “hasta hoy no se le había presentado al socialismo una alternativa comprometida con una visión nueva y global de la ciudad. Rosario necesita recrear su mística y sus esperanzas. Lo mejor es siempre lo que está por venir”.
Entre los puntos altos del debate entre los miembros del flamante espacio político “seguramente estarán autonomía y seguridad”, dijo Miatello, para quien el gobierno de Miguel Lifschitz “no se anima a tomar medidas”.
Para la concejala Laura Weskamp el nuevo espacio, que cuenta con “un guiño del PRO nacional”, es “una oportunidad para demostrarle a la gente que está cansada de las disputas, que el consenso es posible”. En diálogo con El Ciudadano Weskamp dijo: “Una de los grandes impulsos que tuvo la flamante sociedad fueron las coincidencias en muchos temas que tenemos en el Concejo con Diego Giuliano, y es por eso que nos pareció que sería bueno hacer algo juntos”.
“Esperamos que se pueda hacer una alianza a futuro que nos lleve a buen puerto, pero tenemos que empezar a ver qué caminos podemos recorrer juntos”, deslizó la ex directora del Hogar del Huérfano.
Operadores del armado político del espacio dejaron trascender la visión estratégica de una saturación del espacio de centroizquierda, donde conviven el oficialismo, el Proyecto Sur de Alberto Cortés, el Movimiento Evita y el Frente para la Victoria, mientras que lo que se define como centroderecha no tendría demasiados exponentes, a excepción de la probable candidatura del concejal radical Jorge Boasso.
Otro de los puntos que se animaron a destacar los referentes consultados fue que este espacio no tiene un correlato con los armados provinciales o nacionales, si bien es cierto que las afinidades políticas sí existen tanto en Santa Fe como en la Nación. “Esta es una propuesta para Rosario”, sintetizan todos casi con las mismas palabras.