“A orillas de algo majestuoso, donde comienza a fluir vida, nace la historia de Río pero también parte de la nuestra. Ella es hija del agua y lleva consigo un secreto escondido en lo más profundo de su ser”. Así, con el río como fuente de inspiración, con los ecos de la isla y de una ciudad que se acomoda y disfruta de la imponente presencia del Paraná nació Vangart, una producción local de circo-teatro anunciada hace unos meses, que involucra a los directores Sean Mc Keown (autor) James Santos (director artístico) y Diego Castro (idea y producción) y que se conocerá finalmente este jueves para el público en el Galpón 15 de la Franja Cultural del Río, donde seguirá en cartel con una profusa grilla de funciones y entradas populares.
Por varios motivos Vangart se volvió una apuesta y un desafío. En principio, porque busca posicionar a la ciudad y a sus artistas de cara a un propuesta cuya impronta tiene todo lo necesario para estar a la altura de los grandes shows internacionales, sobre todo si se tiene en cuenta que Sean Mc Keown (Montreal) y James Santos (Las Vegas) suman una impresionante trayectoria, dado que fueron los directores de Love the Beatles, Quidam, Alegría, Draliom, Amaluna y Le Reve para el Cirque du Soleil, a lo que se suma el productor local Diego Castro, creador de la idea, quien trabajó con la compañía Fuerza Bruta y los reconocidos artistas Roxette y Morrisey en giras internacionales.
Pero además, porque la ciudad podrá disfrutar de la puesta en valor la tarea de un puñado de artistas locales que manejan las estéticas vinculadas al circo en un ámbito donde la poética de la emblemática compañía canadiense convivirá con el público dividido por una pasarela central, con un espacio destinado a entradas generales y un vip con comidas y bebidas, a lo que se suma, también desde lo local, el vestuario con adaptación y construcción del talentoso Ramiro Sorrequieta y el maquillaje (realización, diseño) de Celeste Arrizabalaga.
Cumplir un sueño
“Hace muchos años que trabajo en la producción técnica de espectáculos; en ese recorrido de ver tantos shows, de mi vínculo con el circo desde hace un tiempo y de una amistad con algunos de sus directores que fue creciendo, se generó esta idea en conjunto de asociarnos para producir un espectáculo de impronta local”, adelantó Diego Castro, quien destacó de este proceso un comienzo en el que debió acercar a estos reconocidos creadores a la una ciudad marcada por ciertas singularidades.
“Antes de montar el show, quise contarles cómo es Rosario, cómo es su gente, cómo se desarrolla la movida cultural de la ciudad y porqué debíamos trabajar con artistas locales que finalmente surgieron de un casting abierto”, agregó el productor acerca del espectáculo que cuenta con el apoyo de la Secretaría de Cultura municipal y el Ministerio de Innovación y Cultura de la provincia, además de un puñado de empresas privadas.
“Ellos viajaron a Rosario, conocieron la ciudad. Después volvió James (Santos) como director artístico de Amaluna (espectáculo del Cirque du Soleil que hizo temporada en la ciudad el año pasado); fue un proceso de trabajo e investigación acerca de la ciudad y el río, se acercaron a la movida artística rosarina que tiene cosas que no pasan en otros lugares. Por ejemplo: ellos no podían creer que tengamos una Escuela Municipal de Artes Urbanas (Emau) que gratuitamente forma a sus alumnos, y que es un semillero de grandes artistas, pero que en general los artistas de las escuelas de arte de la ciudad tienen una formación que es muy completa”, agregó Castro, quien recordó que todo comenzó hace algo más de dos años, cuando se cruzaron en el armado de Séptimo día-No descansaré, el homenaje del Cirque du Soleil a la banda Soda Stereo que el año pasado tuvo su paso por la ciudad.
En los últimos nueve meses, un equipo que involucró a cientos de personajes entre artistas y técnicos comenzó a trabajar en el show propiamente dicho, que contará finalmente con quince artistas en escena y que en cada función presenciarán unos 180 espectadores, con una importante puesta en escena que apostó a un elaborado vestuario, proyecciones, sonido envolvente, efectos especiales y butacas especialmente diseñadas, en un montaje general que en su totalidad sumó el trabajo de unas cuatrocientas personas.
“Estoy orgulloso porque pone en valor a los artistas de la ciudad pero también porque Rosario es la única ciudad del país que tiene un espectáculo que fue creado especialmente, con todo el soporte que implica la presencia de estos creadores, a lo que se sumó hace un tiempo la presencia de Emily Burton, que es set up general del show del Cirque du Soleil en el Caesar Palace de Las Vegas. Todo está apuntado para lograr un show que conjugue lo tecnológico con la belleza a la que nos tiene acostumbrados el Cirque, más allá de que este no es un espectáculo del Cirque du Soleil porque tiene su propia impronta que sí es muy superior a la de otros shows que se han montado en la Argentina”, expresó Castro acerca de un montaje que tuvo entre sus filas, y como coach de acrobacia, al protagonista de Avatar, uno de los más recientes montajes del Cirque du Soleil.
Apuesta vertiginosa
“Este es un show boutique, muy especial y cuidado, que dura 60 minutos que son muy vertiginosos, muy invasivos en el buen sentido para el espectador en relación con los colores que se apoderan del espacio, pero también con los aromas”, dijo Castro. Y concluyó: “Todo está puesto para contar la historia de una chica de nombre Río, que es la conexión de la ciudad con la isla, quien junto a todos sus amigos, que no son otra cosa que toda la fauna de la zona, va desarrollando esta historia que propone una gran fantasía que se vuelve envolvente, desde una gran tormenta en el comienzo hasta una serie de intervenciones y detalles que hacen a todo el montaje y la historia que estamos contando, que también tiene que ver con la ciudad en general, con sus habitantes, con las veredas y las calles violetas tapizadas por las flores del jacarandá, con los peces, el Martín Pescador que es un pájaro típico, los coatíes y una serie de sorpresas que acompañarán un recorrido que se vuelve muy mágico”.
Para agendar
Vangart se presentará desde este jueves (la función del miércoles es especial para prensa e invitados) hasta el sábado inclusive, siempre a las 20.30, en el Galpón 15 (Buenos Aires y el río), y retomará funciones del jueves 28 al 1° de abril (función especial con la presencia de un músico invitado que tocará en vivo el tema principal del espectáculo). Las entradas tienen un costo de 500 pesos y se pueden adquirir en vangart.com.ar