Un joven de 22 años fue asesinado en la tarde de ayer durante un confuso episodio registrado en el barrio Empalme Graneros. El autor del disparo mortal fue un agente que presta servicio en el Comando Radioeléctrico, quien dijo a sus pares que el hecho fue al intentar evitar un asalto. Sin embargo, vecinos de la zona lo desmintieron e indicaron que la víctima fue atacada sin motivo. Además, señalaron que el uniformado vive a pocos metros de donde ocurrió el hecho y que en forma periódica amenaza a la mayoría de los vecinos de la zona. Hace casi un mes se produjo un hecho similar en Navarro al 6000, a 12 cuadras del lugar donde se produjo el supuesto enfrentamiento.
El hecho ocurrió alrededor de las 17.30 de ayer en inmediaciones de pasaje Franklin y Cullen, cuando por causas que se tratan de establecer, Lisandro Daniel Verón recibió un disparo calibre 9 milímetros en el pecho, herida por la cual falleció prácticamente en el acto. El autor del disparo fue un agente que vive en esa cuadra, quien según vecinos salió de su vivienda vestido con una remera, ojotas y en calzoncillos y con su pistola reglamentaria en la mano.
Fuentes policiales se negaron a dar precisiones sobre cómo ocurrieron los hechos, aunque voceros señalaron que el agente sostuvo que él salió a la calle al escuchar gritos y que vio a dos personas corriendo tras un robo. Que dio la voz de alto y que la víctima estaba armada y que por eso efectuó un disparo.
Sin embargo, vecinos de la zona dijeron que no hubo enfrentamiento ya que el joven fallecido no estaba armado. Algunas personas señalaron que el agente, cuyos datos no fueron aportados, vive sobre calle Cullen y que en varias oportunidades amenazó a los residentes en la zona.
El caso, que ocurrió en jurisdicción de la seccional 20ª, es investigado por la división Judiciales, junto al Juzgado de Instrucción en turno.