Pese a las restricciones vigentes por la segunda ola de contagios de coronavirus, el sector gastronómico de Venado Tuerto resolvió trabajar hasta las 23 durante los días del fin de semana largo, desobedeciendo el decreto provincial que habilita esa actividad solo hasta las 19. La decisión causó malestar en el gobierno provincial, desde donde le apuntaron directamente al intendente Leonel Chiarella.
La medida fue consensuada por 40 propietarios de bares y restaurantes de la ciudad de Venado Tuerto que, desde el comienzo de la pandemia, vienen manteniendo contacto directo mediante un grupo de Whatsapp.
Una vez comunicada la decisión a la Municipalidad, el secretario Desarrollo Productivo y Planeamiento Urbano, Santiago Meardi, le dio el visto bueno a los gastronómicos, según consigna el portal Venado24. El funcionario comentó además que acompañaron a los comerciantes en el petitorio que elevaron al gobierno provincial para pedir mayor apertura a las distintas actividades, pero no obtuvieron respuestas.
“Nosotros no tenemos inconvenientes en que abran, pero les aclaramos que el control sobre el cumplimiento de la restricciones es del Ministerio de Seguridad de la provincia”, aclaró Meardi. “Desde el municipio no les cobramos los impuestos, pero eso no alcanza. Las ayudas provinciales no llegan y la situación es desesperante”.
Malestar en la Casa Gris
El anuncio de los gastronómicos de Venado Tuerto cayó decididamente mal en el gobierno provincial. El ministro de Gestión Pública, Marcos Corach, responsabilizó al intendente Chiarella por la movida prevista para este fin de semana largo y le pidió “empatía” con el personal del sistema de salud que trabaja a destajo para contener el avance de la pandemia en todas las localidades de la provincia.
El 3 de junio Corach ya le había mandado una carta al intendente de Venado Tuerto en respuesta a un pedido de reapertura de actividades deportivas en su localidad. “Le respondí, en esa oportunidad, tratando de hacerle entender que tenemos que estar a la altura de lo que estamos viviendo, reflexionar, hacernos cargo del papel que nos toca ante una situación de emergencia”.
“Las medidas –siguió Corach– son a favor de toda la población y del valor más preciado que todos tenemos, que es la vida. Esta información (la extensión horaria decidida por los gastronómicos) se da en el momento más crítico. Venado hoy tiene el 100% de sus camas críticas ocupadas. Y el 3 de junio, cuando él me solicitaba la apertura de los clubes, también estaban el 100% de las camas ocupadas”.
En declaraciones a Radio 2, el ministro de Gestión Pública agregó: “No solo están todas las camas ocupadas, sino que cinco de cada siete pacientes que se internan allí son personas de Venado Tuerto. En la localidad pasamos de 8 a 22 camas críticas. El gobierno provincial hace su parte, hace el esfuerzo, y la verdad es que en este caso no encontramos una correspondencia por parte del intendente de Venado Tuerto”.
Por último, Corach le pidió al intendente Chiarella “que se ponga en el lugar de los médicos y los enfermeros, que están exhaustos, que se ponga en el lugar de cada una de las familias que tienen algún integrante en estado grave, de aquellos que perdieron seres queridos y de los contagiados que están corriendo el riesgo de no poder recibir la atención adecuada”.