“El aguinaldo de Perón se lo lleva la Nación”, fue el latiguillo con rima elegido por Gerónimo “Momo” Venegas para graficar la lucha del sindicalismo leal a Hugo Moyano por elevar el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias. El secretario general de la Uatre (trabajadores rurales) sostuvo que el gobierno de Cristina Kirchner “se ha alejado de los trabajadores” y no dudó en catalogarlo como “el más corrupto desde la vuelta de la democracia”.
En diálogo con El Ciudadano, Venegas fustigó al Ejecutivo nacional: “Es un ente recaudador a través del sacrificio de los trabajadores y no solamente sigue recaudando sino que los aumentos salariales que se están logrando en esta etapa de discusión paritaria se los está llevando el gobierno”.
“Estamos en un plan de lucha contra el mínimo no imponible (de Ganancias) que es un impuesto distorsivo que el trabajador paga por trabajar. Al trabajador no solamente le podan el salario por arriba, sino que le podan el salario por abajo quitándole la posibilidad de cobrar las asignaciones familiares”, añadió el dirigente, que el jueves encabezó una jornada de discusión con peronistas disidentes en el salón Metropolitano de Rosario.
“Y falta el 82 por ciento móvil para los jubilados, que si no tienen hoy un nieto que le compre los medicamentos se mueren de una gripe”, continuó con su queja.
—¿Usted considera que el gobierno nacional se ha alejado de los trabajadores?
—Sí, totalmente. Este no es un gobierno que piensa en el pueblo, todo lo contrario, es un gobierno que de los últimos 30 años es el más corrupto que hay en la democracia. No solamente se ha alejado de los trabajadores sino de todos los argentinos.
—Con respecto a la CGT, ¿sigue firme la idea de llevar adelante el congreso del 12 de julio para nombrar a Moyano como su secretario general?
—Sí, el 12 vamos a normalizar la CGT, se han cumplimentado todos los pasos legales para llegar al congreso. Nosotros cuando escuchamos decir a dirigentes que no deberíamos ir al congreso, que no se debería normalizar la CGT, que Moyano no tiene gremios, nosotros vamos a demostrar que el 12 vamos a dejar normalizada la CGT.
—La reunión convocada por el ministro de Trabajo Carlos Tomada no ha logrado ningún acercamiento entre el moyanismo y el sector de los “Gordos” e independientes.
—No, era para notificar la impugnación del sector que había impugnado. Nosotros vamos a contestar en la Justicia esta impugnación, no es el Ministerio el que tiene que resolver si es justo o no la impugnación del sector este. Pero yo digo que acá se va a dar lo que decía Perón: “Con los dirigentes a la cabeza o la cabeza de los dirigentes. El pueblo ya no resiste más esta soberbia del gobierno, que creen que están en otro país distinto al que vivimos millones y millones de argentinos.
—¿Ve una posibilidad de ruptura en la central obrera si siguen las posiciones antagónicas entre ambos sectores?
—No, ruptura no. Acá lo que va a pasar es que va a haber gremios que van a quedar afuera de la CGT, que no van a compartir con nosotros la CGT. Acá el objetivo de todos los trabajadores es que haya una central obrera que realmente reclame por los derechos de los trabajadores y que no se vaya por la tangente.
«El trabajo en negro es un problema en toda la economía»
Gerónimo Venegas admitió que «el trabajo en negro es un problema» pero se encargó de aclarar que se da en «todos los órdenes» de la economía y no sólo en su gremio de trabajadores rurales, donde el problema abarca al 70 por ciento de los empleados. «Somos nosotros los que los encontramos en el campo trabajando en situaciones infrahumanas y el gobierno nos quiere hacer creer que es el gremio el responsable. No, el gremio no tiene esa responsabilidad, la tiene el Estado porque ejerce el poder de Policía», amplió.
«Yo no puedo hacer inspecciones porque no soy inspector. Si el gobierno con inspecciones y relevamientos tratara de que el 45 por ciento de los trabajadores en negro pasaran a ser trabajadores activos, tendría los fondos suficientes para pagarles el 82 por ciento móvil a los jubilados», indicó.
Venegas destacó que «hay una contradicción» en el gobierno nacional porque «¿qué pueden pensar los industriales argentinos cuando ven que la presidenta viaja con los representantes de La Salada a países de afuera?»
«Esto es lo que muestra el gobierno. Por un lado dice que hay trabajo en negro y por el otro lleva como representante de la industria argentina a los negreros más grandes que hay en el país», dijo el «Momo» Venegas en diálogo este diario.
«Made in Argentina es el trabajo esclavo de La Salada, gente que trabaja sin nada, 24 horas por día y en muchos casos indocumentados para abaratar la mercadería que producen», concluyó.
