La oferta descomunal de la 12ª edición del Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (Bafici), que comienza el 8 de abril y que alcanza a 422 títulos entre cortos y largometrajes, con la que el público se enfrenta a nombres de realizadores desconocidos y a propuestas de los más diversos géneros, estéticas, orígenes y temas es ya una marca de origen de esta muestra. Como siempre, habrá mucho cine joven y experimental, pero también rescates de clásicos y films considerados “malditos”, documentales políticos o películas sobre distintos géneros musicales.
La Competencia Internacional presenta este año un programa con 19 títulos (tres de ellos argentinos), entre los que se destaca Mary & Max , una singular y conmovedora película de animación artesanal con el método stop motion con muñecos de plastilina, dirigida por Adam Elliot, que describe la relación epistolar entre una niña australiana de 8 años (la voz de Toni Colette) y un judío neoyorquino de 44 (Philip Seymour Hoffman), que se extiende durante buena parte de las décadas de los 70 y los 80.
Otro título atractivo de esta selección es Police, Adjective, un nuevo film del rumano Corneliu Porumboiu (Bucarest 12:08), que muestra con eficacia y en sus múltiples facetas y alcances los dilemas éticos y morales de un detective de policía al que sus superiores le encargan vigilar a un estudiante secundario que todos los días consume cigarrillos de marihuana en un parque. La película fue premiada en la sección Un Certain Régard en la edición 2009 de Cannes.
Con un fuerte impacto sociopolítico llega Ajami, película de los israelíes Scandar Copti y Yaron Shani, que narra –a la manera de la italiana Gomorra– la degradación cotidiana en una zona en la que al odio religioso entre musulmanes, cristianos y judíos, se le suman policías descontrolados, vendedores de droga y niños a la deriva. Fue una de las cuatro películas derrotadas por El secreto de sus ojos en la lucha por el Oscar a la mejor película extranjera (el Bafici también exhibirá La cinta blanca, de Michael Haneke, otra de las nominadas y ganadora de la última Palma de Oro en Cannes).
La participación nacional tendrá, no obstante, un rol fundamental. La inauguración quedará en manos de Rafael Filippelli y su Secuestro y Muerte, basada en un texto de Beatriz Sarlo, que fue coguionista del film junto a Mariano Llinás y David Oubiña. La película –que se estrenará en el Teatro 25 de Mayo–, ficcionaliza las horas finales de Pedro Eugenio Aramburu. Filippelli, que no ocultó su emoción por el reconocimiento, había ganado el premio a mejor director de la competencia oficial por su Música nocturna.
Para quienes quieran arriesgarse un poco más, hay también en la competencia principal películas de producción exigua pero que resultan curiosas en sus propuestas. Se trata de La boca del Lupo, ópera prima del italiano Pietro Marcello que describe una historia de amor en la decadente ciudad de Génova; y Alamar, film de Pedro González-Rubio que viene de triunfar en Rotterdam, sobre la relación entre un joven mexicano y su hijo de cinco años durante el viaje a una paridisíaca isla antes de que el niño se vaya a vivir con su madre italiana, ya divorciada del padre.
En la sección Trayectorias se podrán ver los más recientes films de grandes autores, como el francés Jacques Rivette (la melancólica 36 vues du Pic Saint Loup, sobre la conexión que se establece entre un misterioso hombre de origen italiano y los integrantes de la troupe de una compañía de circo clásico que ofrece su última gira, tras la muerte del fundador); del coreano Hong Sang-soo se verá Like You Know It All, una comedia de enredos por momentos desopilante y en otros bastante cruel sobre un director de cine cuarentón invitado a participar como jurado de un festival de un pequeño pueblo costero); el italiano Marco Bellocchio mostrará Vincere, poderosa épica casi operística sobre la desgraciada vida de Ida Dalser, el gran amor de juventud de Benito Mussolini y con quien tuvo un hijo que nunca fue reconocido; o el último título del japonés Nobuhiro Suwa llamada Yuki y Nina, sobre la crisis y separación de un matrimonio entre un francés y una nipona narrado desde la perspectiva y de las sensaciones íntimas de la única hija, de 9 años, que tiene la pareja.
Uno de los focos que aparece como más interesante en esta edición será el dedicado al matrimonio entre la italiana Tizza Covi y el austríaco Rainer Frimmel, célebres documentalistas que el año pasado debutaron en la ficción con la notable La Pivellina, sobre unos artistas de circo que crían a una niña de dos años abandonada en una plaza, rodada con actores no profesionales, con cámara de 16 mm. en mano, y con una combinación entre rigor artesanal y humanismo.
También aparece como muy interesante un desgarrador melodrama como Morrer como um homem, del portugués João Pedro Rodrigues, sobre las crudas experiencias de un viejo travesti; dos provocativos estudios sobre la religión (Lourdes, de la austríaca Jessica Hausner; y Hadewijch, del francés Bruno Dumont, quien también estará presente en el festival), y a documentales como El General, de Natalia Almada, en el que la directora reconstruye la historia política y familar de su bisabuelo Plutarco Elías Calles, referente de la Revolución Mexicana y presidente de ese país entre 1924 y 1928; y Sweetgrass, de Ilisa Barbash y Lucien Castaing-Taylor, que durante más de tres horas registra el último paso de dos carismáticos cowboys por unos montes en Montana, donde pastan sus rebaños de ovejas durante el verano.
Como suele ocurrir todos los años, habrá acercamientos a grandes músicos y bandas como The Kinks (Do It Again, de Robert Patton-Spruill), el contrabajista Charlie Haden (Rambling Boy, de Reto Caduff), Frank Zappa (A Pioneer of the Future of Music, de Frank Scheffer), Phil Spector (The Agony and the Ecstasy of Phil Spector, de Vikram Jayanti), o The Magnetic Fields (Strange Powers , de Kerthy Fix y Gail O´Hara) y recuperación de clásicos tan disímiles como Antonio das Mortes: O Dragão da Maldade contra o Santo Guerreiro, de Glauber Rocha; Cazadores de almas, de Joseph von Sternberg; y Escala en la ciudad, de Alberto de Zavalía. Es decir, una oferta amplia, inteligente y audaz para satisfacer las más diversas exigencias de los cinéfilos de toda laya.
Si bien las proyecciones recién comenzarán el jueves 8 de abril, la venta anticipada de entradas arrancará mañana, tanto en Internet (www.bafici.gov.ar) para todos aquellos que viajen desde el interior o exterior, como de forma personal en el Hoyts de Abasto o en la Casa de la Cultura (Avenida de Mayo 575).