Víctor Hugo Morales, admirador y difusor de la obra de Astor Piazzolla quien comparte con María Seoane el libro Momentos, que repasa 30 sucesos en la vida y obra del genial músico fallecido hace 29 años, destacó que “la impronta de la búsqueda más profunda que Piazzolla decidió para su carrera es muy inspiradora”.
Haciendo equilibrio entre la música y el carácter del bandoneonista y compositor, Morales apuntó durante una entrevista con Télam que “Piazzolla era un tipo bravo tanto en la pelea física como argumental y eso le permitía forcejear con el mundo que no le gustaba”.
“Tenía una formidable disposición para la pelea y una gran resistencia. En términos metafóricos le pegaron tanto y hasta en el piso los ignorantes como haciendo fila, pero él siempre se levantó. Piazzolla fue alguien que nunca dejó de dar pelea”, subrayó el comunicador, de 73 años que se recuperó de coronavirus y continúa conduciendo La Mañana en AM 750, editorializando en El Diario por C5N y relatando la Copa América como parte de Relatores por Radio Nacional.
Junto a Seoane y a través de la investigación periodística de Nicolás Tolcachier publicada por Editorial Octubre, Momentos visita 30 acontecimientos en la existencia personal y musical del artista centenario.
Con esta reciente publicación, además, Víctor Hugo suma otro gesto en torno al músico ya que hace más de dos décadas propone Estación Piazzolla, un espacio radial que este año desembarcó en Radio Nacional donde se emite los domingos de 11 a 12.
Pese a esta persistencia y a su pasión melómana, el periodista advirtió que es un “disfrutador y un divulgador entusiasta pero no con aires de saber exactamente nada”. “Apenas me atrevo a decirle a los oyentes «prueben con esto que es bellísimo y hace más linda la vida»”.
“Andador” del mundo
“Siento una total admiración por la música de Piazzolla y como además soy un gran andador del mundo, he visto hacer Piazzolla en tantos teatros del planeta y por eso siempre estoy dispuesto a colaborar en difundir su legado. Por eso Estación Piazzolla porque no podía creer que no hubiese algo dedicado a él en radio o televisión y por eso acepté gustosamente esta invitación a ser parte de Momentos que es sencillamente una joya”, apuntó Morales sobre las razones que lo llevaron a cultivar la figura del músico.
“El libro toma momentos decisivos de la vida de Piazzolla y desarrolla cada uno de esos hitos de una manera que me pareció una buena idea ya que regala un rato de material de lectura y eso acerca a lectores no siempre son entrenados que tienen la facilidad de poder ir leyendo separadamente cada una de esas 30 estaciones y este armado otorga una ventaja en ese sentido”, puntualizó sobre Momentos.
Consultado sobre su historia favorita en torno a la figura de Piazzolla, el periodista contó: “Tengo mucha ternura por el momento en el que Astor se entera de la muerte de su padre y se pone a trabajar sobre un tango ya existente llamado «Nonino» y le hace una prolongación muy dulce. El adiós está escrito sobre el tango ya compuesto para su padre y fue su manera de hacer catarsis a través de la música”.
Los 100 de Piazzolla
“Las cuestiones espasmódicas por el homenaje hay que ver hasta qué punto luego perduran y espero no sea solamente un gesto por los 100 años. En el mundo la obra de Piazzolla es muy valorada y aquí cada día más porque no hay dudas de que se trata de una música excepcional y que ahora está de buenas con la Argentina donde tuvo tantos detractores”, opinó Morales sobre el aniversario de nacimiento del artista y los tributos que eso suscitó.
“Cuando parece que todo está hecho siempre hay más para hacer. La impronta de la búsqueda más profunda que Piazzolla decidió para su carrera inspira a otros músicos y cito solamente a dos como pueden ser Diego Schissi o Gabriel Lombardo que no tienen la chance de la divulgación a la que yo me acostumbré que es la radio y la televisión. Todas estas músicas, incluida la piazzolliana necesitan de la reiteración porque la primera escucha es un desafío a veces difícil para el oyente pero todo lo que escuchás tres o cuatro veces es mejor y esta es quizás la desventaja que tiene el autor nuevo que, de todos modos, tiene sus seguidores y, como ocurría con Piazzolla, abre nuevos caminos”, analizó.
Respecto al espíritu combativo de Piazzolla y cómo eso lo convocó, Morales dijo: “Quizás porque esas admiraciones no son casualidades y uno siente que hay gente que te representa. De hecho, el primer libro impactante de mi vida es Brand, de Henrik Ibsen, (un drama en cinco actos sobre un pastor protestante que quiere «sanar a la raza humana de sus vicios e imperfecciones») y es cautivante para mí cada personaje que da una pelea que de antemano se sabe que tiene tantas dificultades. Es algo que a mí me provoca mucha admiración, me subyuga de antemano”.
Vueltas del fútbol
Hace poco tiempo y a través de la plataforma Relatores tuvo grandes repercusión las repeticiones de los relatos de Morales en los partidos decisivos del Mundial de México 1986, algo que él asegura haber vivido con “mucha emoción” y como “víctima, entre comillas, de la sensación de abuso de presencia”. “Ha sido muy fuerte el reconocimiento que se hace del gol de Diego, del relato de la final, son días muy impactante para mí y agradecido a la vida por lo que ha pasado. Siento que recibo siempre más de lo que doy”, agregó y sobre su rol actual como relator de la Copa América después de haber padecido coronavirus confesó: “La covid me atacó por todos lados pero no en las cuerdas vocales y al recuperar fuerzas y músculos, certifiqué que la pasión por relatar seguía intacta. Así que al cabo de cada relato quedé contentísimo porque amo la precisión y el ir sentado en la pelota y con todo eso quedé ciertamente muy feliz”.